La única vidriera dibujada y firmada por el arquitecto francosuizo Le Corbusier, en 1955, fue destruida la noche del viernes por vándalos que entraron a la Capilla de Notre Dame du Haut de Ronchamp, al este de Francia, quienes la dejaron quebrada en mil pedazos.

De medio metro de alto por medio de ancho, era la ayor del sitio y en ella figuraban una luna con rostro humano. El edificio es considerado parte del Patrimonio del siglo XX después de que fuera reconstruido por el artista tras los bombardeos de Segunda Guerra Mundial.
El director de la Fundación Le Corbusier, Michel Richard, lamentó que no se haya podido preservar uno de los elementos más emblemáticos y frágiles del lugar y criticó que antes de eso, habían tratado sin éxito de inscribir esta obra en la lista del Patrimonio de la UNESCO.
Mientras se investiga el hecho, los restos de la vidriera fueron trasladados a la Dirección de Asuntos Culturales para que un experto se encargue de elaborar una copia de la original.
Con nformación de ElPaís.
21 de enero de 2014, 13:01