Lo ocurrido en el Fyre Festival que se celebró en 2017, sigue siendo uno de los escándalos más relevantes de la industria de la música, y Kendall Jenner resultó implicada en una demanda.
El show estaba planeado para realizarse durante dos fines de semanas en una isla de las Bahamas que, supuestamente, había pertenecido a Pablo Escobar.
Se prometía a los asistentes vivir una fiesta de lujo, con famosas bandas, vista al mar, alojamiento cinco estrellas, comida gourmet y fiestas privadas a bordo de yates.
Por si eso fuera poco, también se anunciaba la compañía de famosas modelos y artistas. Todo a cambio de una entrada de precio alto que, para muchos, valía la pena.
El festival se llevó a cabo, pero la estancia de lujo fue una promesa sin cumplir, pues los asistentes encontraron tiendas de campañas llenas de agujeros, colchones mojados, bandas que nunca llegaron, falta de agua, pésima alimentación y la imposibilidad de abandonar inmediatamente el lugar.
La lluvia de quejas no se hizo esperar en redes sociales.

Billy McFarland, uno de los organizadores fue condenado a seis años de prisión por delito de fraude, pero hay muchos más implicados, pues la misma empresa de Billy demandó a las celebridades que habían recibido una fuerte suma de dinero para promocionar el festival o para presentarse, entre ellas Kendall Jenner.
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Gregory Messer, quien interpuso la demanda afirmó que el dinero que recibieron las celebridades era parte del elaborado "esquema de McFarland para estafar a los inversionistas".
Ahora, Kendall Jenner está siendo demandada por 275 mil dólares.
También están implicados otros famosos, entre ellos Blink-182, Lil Yachty y Migos, Pusha-T, Desiigner, Tyga. Entre ellos también está la modelo Emily Ratajkowski, cuya demanda es mayor que la de Kendall, pues asciende a 300 mil dólares.
*Con información de: Sopitas