El Papa Francisco alabó hoy el uso de las nuevas tecnologías como las redes sociales o Internet para comunicar, también para la Iglesia, aunque advirtió de algunos peligros que conllevan como la "exclusión" y "la manipulación".
"No tengan miedo de hacerse ciudadanos del mundo digital", instó el Papa Francisco a la Iglesia y agregó incluso que Internet "es un don de Dios", en su mensaje para la Jornada de las Comunicaciones Sociales, presentado hoy por el Vaticano.
El mensaje de este año lleva el título de "Comunicación al Servicio de una Auténtica Cultura del Encuentro" y significa una bendición de Francisco a las nuevas tecnologías de la comunicación.
El Papa argentino también destacó que existen "aspectos problemáticos" de esta era de las nuevas comunicaciones como "la velocidad con la que se suceden las informaciones, que supera nuestra capacidad de reflexión y de juicio, y no permite una expresión mesurada y correcta de uno mismo".
El pontífice advirtió del riesgo "de encerrarse en una esfera hecha de informaciones que sólo correspondan a nuestras expectativas e ideas, o incluso a determinados intereses políticos y económicos".
Otro de los aspectos negativos -agregó- es que estas nuevas tecnologías digitales "pueden terminar por aislarnos de nuestro prójimo, de las personas que tenemos al lado".
También rechazó aquella comunicación que tiene como "objetivo preponderante inducir al consumo o a la manipulación de las persona" y la que nos condiciona "hasta el punto de hacernos ignorar a nuestro prójimo real".
A pesar de estos límites, el papa recalcó que éstos "no justifican un rechazo de los medios de comunicación social".
Para concluir, el Papa sugirió que la iglesia debe abrir las puertas al mundo digital.