Ricardo Bressani Castignoli, científico guatemalteco que inventó la Incaparina hace más de 50 años, falleció este viernes, confirmaron fuentes de la Universidad del Valle, donde laboraba a la fecha.
Tenía 88 años y dedicó su vida a investigar alternativas nutricionales para los guatemaltecos y centroamericanos que viven en condiciones de pobreza, y fue así como inventó harinas nutricionales y otros alimentos enriquecidos, encabezadas por la Incaparina, el Vitatol y la Bienestarina.
Bressani quien fue reconocido a nivel internacional por múltiples estudios pioneros sobre las mejoras al valor nutritivo del maíz, obtuvo una licenciatura en Química de la Universidad de Dayton, Ohio, Estados Unidos; una maestría en la Universidad estatal de Iowa, y un doctorado en el área de bioquímica en la Universidad Purdue, Indiana.
Tras culminar sus estudios, regresó a Guatemala donde se incorporó al equipo del Instituto de Nutrición Centro América y Panamá (INCAP), donde laboró más de tres décadas, ocupando entre otros puestos, el de jefe de la División de Ciencias Agrícolas y de Alimentos.
A lo largo de su vida fue invitado a participar en proyectos internacionales, recibió innumerables condecoraciones y fundó la Academia de Ciencias del Tercer Mundo, en Trieste, Italia.
Además, integró la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de Guatemala y la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.
Recibió la Orden del Quetzal en el Grado de Gran Cruz y la Medalla de Oro en Ciencia y Tecnología del Congreso, pero su satisfacción principal fueron sus aportes a la lucha contra la desnutrición y a ello dedicó su vida. Descanse en paz.
