Pese a que se ha avanzado en el marco legal para proteger a los menores en la explotación sexual y trata de personas, los casos no se han reducido proporcionalmente. Además la impunidad de los agresores es bastante notoria.
"De 701 denuncias por Explotación Sexual Comercial en Niñas, Niños y Adolescentes (ESCNNA) recibidas en el Ministerio Público desde 2009, tan sólo han derivado en 65 sentencias condenatorias", denunció Sandra Gularte, defensora de las Personas Víctimas de Trata.
Más de la mitad de las denuncias se concentran en cuatro departamentos: Guatemala (131), Retalhuleu (112), Suchitepéquez (87) y Quetzaltenango (69).
Según Gularte, en el caso de Guatemala es por la elevada población y temen que en los otros tres sea por prácticas de turismo sexual.
En el mundo hay más de 150 millones de niñas y 73 millones de niños que han sido forzados a mantener relaciones sexuales. En el caso de Guatemala, desde 2009 hasta la fecha, el MP registró 1 mil 148 víctimas de explotación sexual comercial, de las que el 42% son niñas, niños y adolescentes.
Las víctimas
Según el informe presentado sobre la situación de la explotación sexual en Guatemala, los grupos más vulnerables son las niñas y adolescentes.
Las adolescentes entre 12 y 18 años se vuelven más vulnerables si además pertenecen a un grupo étnico desigual, si vive en una zona rural, si no tiene acceso a la educación y si además tiene alguna discapacidad.
"Ahora se ha sumado un nuevo grupo que engloba a las niñas migrantes no acompañadas", señaló Gularte haciendo referencia a la crisis migratoria de menores hacia EE.UU. en busca de un mejor futuro.
Guatemala permisiva
Gularte apuntó en la presentación del informe que los números de casos no se reducen en el país porque Guatemala es un país que lo permite y destacó cuatro factores.
Por un lado, el 70.3% de la población guatemalteca está sumida en una pobreza multidimensional. Además, el sistema patriarcal machista favorece a que se den estos tipos de delito.
También favorece el fácil acceso a las nuevas tecnologías de menores. "Debemos mejorar la comunicación sobre Internet y poner filtros a nuestros hijos", recomendó la defensora para proteger a los menores.
Y por último, Guatemala tiene una industria de turismo tolerante a que se pueda dar las visitas de turistas sexuales.