Los malos aficionados no han desaparecido de los estadios y el caso más condenable se dio este fin de semana en el fútbol de Turquía. La víctima fue el portero del Istanbul BB, Volkan Babacan.
El guardameta se preparaba para hacer una jugada de rutina cuando, de pronto, una botella fue lanzada desde las gradas y le pegó con fuerza en la cabeza. Las cámaras captaron el momento justo en el que el turco recibió el golpe.
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Tras recibir el impacto, Volkan se desplomó sobre el campo y esperó la atención del personal médico. Afortunadamente, no fue de gravedad, ya que el proyectil resultó ser una botella de plástico con agua.
"Esta vez me ocurrió a mí. Me hubiese gustado retirarme en este club. Es una lástima que nuestros padres o seres queridos tengan que ver lo que sucede en estos partidos", lamentó el portero, quien anteriormente defendió los colores del Fenerbahçe.
Volkan Babacan jugó para dicho equipo desde el 2007 al 2010, tiempo en el que consiguió hacerse con el título nacional en dos oportunidades. Sin embargo, los fanáticos que antes lo apoyaban ahora están en su contra.
La Federación de Fútbol Turca tomará cartas en el asunto e investigará a fondo para saber quiénes fueron los agresores y sancionarlos.
*Con información de Infobae
