Los efectos de la adjudicación anómala que el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) efectuó a la Droguería Pisa, continúan vigentes y en los últimos días se han cobrado la vida de otro paciente renal, elevando la cifra de decesos a 17.
El fraude referido llevó a que más que una celebración del Día del Padre, el 17 de junio recién pasado, se constituyera en el último día en que Salvador Camajá compartió con su familia, ya que debido a una complicación por peritonitis, falleció el jueves 18.
Con 52 años, Salvador, originario de Baja Verapaz, no había presentado problemas en sus casi tres años de recibir el tratamiento de diálisis peritoneal, según detalla su esposa Elisa Jerónimo.
Salvador llevaba más de un mes de permanecer internado en hospital del IGSS, ubicado en la zona 9, luego de que el 15 de mayo su salud se agravara tras ser tratado con los productos de Pisa, explicó Sorayda Macz, titular de la Asociación de Pacientes Renales de Diálisis Peritoneal del IGSS.
Los Camajá Jerónimo, que sepultaron el último viernes a la cabeza de su hogar, se muestran consternados; y al igual que otras 16 familias, claman por que se haga justicia contra quienes antepusieron sus interese económicos a la salud de los afiliados al Seguro Social.
Macz añadió que, a raíz de la intervención de Pisa, 74 pacientes continúan internados en el IGSS por peritonitis y entre los pacientes renales se destaca el caso de una mujer que pese a que fue trasladada a un tratamiento de hemodialisis no muestra mejoría.
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