Aunque pueda parecer tarea fácil, muchos son los que lo intentan y pocos los que consiguen colar una canción en el hilo musical imprescindible de autorradios, chiringuitos y discotecas costeras con la fuerza con la que Enrique Iglesias ha consolidado "Bailando" en las listas de este verano.
Desde hace semanas el madrileño se mantiene inamovible en el número 1 de los éxitos latinos de EE.UU. y de España, tanto en la lista oficial de "singles" como en la de los servicios de "streaming" como Youtube, Spotify y Deezer, superando sin problema el millón de reproducciones.
Su colaboración con el cubano Descemer Bueno, incluida en su disco "Sex + Love" (2014), no es la única que se ha alzado en las preferencias estivales del hemisferio Norte, con numerosas coincidencias independientemente del punto del planeta en el que nos encontremos.
No todo es magia digital. El contoneo latino de "Bailando" tiene su continuación en "hits" surgidos del último Mundial de Fútbol de Brasil, como el "La la la" de Shakira, "We are one (ole ola)" de Pitbull, Claudia Leitte y Jennifer López, o "Vida", de Ricky Martin.
El puertorriqueño y la neoyorquina son protagonistas asimismo de una canción estrenada hace meses que sigue dando sus frutos, "Adrenalina", de Wisin, como le pasa a la radicalmente optimista "Happy", de Pharrell Williams, cuya extrema longevidad en listas va camino de convertirla directamente en la "canción del año".

El pop también pone su granito de arena con Cheryl ("Crazy stupid love", actualmente en el podio británico de ventas) y contribuye a lanzar nuevos talentos, como Kiesza (y el electropop de "Hideaway") o la joven estadounidense Ariana Grande, que ha sido número 1 mundial con "Problem".
En ella colabora la rapera australiana Iggy Azalea, otro valor emergente, que coloca una segunda canción entre las más "pinchadas": "Fancy", junto a Charlie XCX.
En España la revelación se llama Dvicio, una "boy band" que ha subido puestos cantándole al "Paraíso" en un anuncio comercial de un conocido restaurante de hamburguesas. La publicidad en televisión, en especial la de cervezas, se ha convertido en un campo abonado para consolidar temas. Esta vez la propuesta más pujante se llama "A place called world" uniendo a artistas como Annie B Sweet.




