La empresaria, diseñadora y modelo guatemalteca Francesca Kennedy llamó al número de emergencia de la Policía Nacional Civil (PNC) pidiendo ayuda por la agresión física de la que era objeto por parte de su novio, el futbolista Marco Pablo Pappa.
Un informe de la PNC detalla que la llamada fue realizada el 19 de septiembre de 2017. La mujer pidió auxilio y una unidad llegó al apartamento en la zona 14 donde vivía la pareja.
La víctima dijo, según su declaración en la fiscalía, que su novio la golpeó después de una discusión. La policía no capturó ese día al futbolista e instó a la empresaria a denunciarlo. Ella lo hizo por violencia física y así surgió el caso penal por el que se capturó al volante.
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El Ministerio Público (MP) realizó la investigación y recabó diversas evidencias, como el testimonio de los agentes que auxiliaron a Kennedy; además se realizaron exámenes físicos y psicológicos.
El abogado que representa a la empresaria, Julio Barrios Prado, declaró respecto al caso: "Nos parece oportuno que el MP haga su labor, especialmente en los casos de violencia contra la mujer, como el que sufrió mi clienta, para que esto no se vuelva a repetir".
Por su parte, Pappa se cubrió el rostro con un sudadero a su llegada a la sede del juzgado donde enfrentará la audiencia de primera declaración y no se pronunció respecto al caso.
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Kennedy es una guatemalteca que ha sido reconocida internacionalmente por su labor, incluso la revista Forbes resaltó su trabajo en un reportaje. Ella y el jugador vivieron juntos durante cinco meses.
