El atleta norcoreano Om Yun-Chol hizo historia de nuevo para el deporte de su país, al obtener la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río 2016 en la categoría de 56 kilos en halterofilia.
No obstante, Yun-Chol teme ser ejecutado al volver a Corea del Norte por “deshonrar a su líder” Kim Jong-Un.
En su intervención tras recibir la medalla, Om Yun-Chol sorprendió al decir que “no le teme a la muerte” y que está dispuesto a pagar dicho precio por deshonrar a su país. “Estoy convencido que es la única forma de pagar mi gratitud”, dijo.
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En los últimos cuatro años, el dominio de Yun-Chol había sido total. Después del oro de Londres 2012 consiguió encadenar tres títulos en mundiales, pero en Río 2016 levantó 303 kilos, lo que le brindó la plata y el primer lugar fue para el chino Long Qingquan.
“Kim Jong-il (fallecido líder norcoreano), siempre será mi inspiración y siento no haber sido capaz de recompensarle con una medalla de oro. No creo que pueda ser un héroe para mi pueblo con una (medalla) de plata”, dijo el atleta, pese al logro obtenido.
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Sin embargo, la posibilidad de que sea ejecutado no ha sido confirmada.
*Con información de elsalvador.com
