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Chiquimulilla, Santa Rosa está de luto. Después del asesinato del maestro Gustavo Adolfo Arrecis Pineda, de 33 años, mientras impartía clases en la Escuela Oficial Rural de la aldea Las Marias, el municipio quedó consternado.
Después de conocer al maestro, su dedicación al trabajo y al deporte, entre los vecinos predomina una cuestión: ¿por qué a él?
En el aula, algunos libros de los alumnos quedaron con manchas de sangre luego del asesinato. (Foto: Wilder López/Soy502)
Cientos de personas, entre los que se encontraron familiares, amigos, vecinos y alumnos se acercaron hasta la que era su residencia, en un humilde terreno en el sector II de la aldea Piedra Grande, para velarlo.
Un terreno que heredó su padre, Timoteo Arrecis, hace más de 20 años y que trajo de vuelta a Gustavo y sus cuatro hermanos a Chiquimulilla. “Me arrepiento de haber vuelto desde la capital, primero se fue mi esposa y ahora mi hijo”, recordó con gran dolor el padre de la víctima.
Gustavo era maestro del Estado y desde hace tres años en Las Marias. En la escuela pública compartía docencia con Gladys Aidé de la Cruz Cristales, directora y maestra de primero, tercer y quinto grado y Sandra Patricia García Hernández, dedicada a las tres etapas de la preprimaria. A Gustavo le correspondían los grados de segundo, cuarto y sexto en el horario matinal.
Así lucía la escena del crimen, el día que ocurrió el hecho. (Foto:Archivo)
Por la tarde impartía clases de matemáticas en el Colegio Evangélico El Shaddai y durante los fines de semana como catedrático en el Centro Universitario de Santa Rosa (Cunsaro), extensión de la universidad San Carlos.
Como todos los maestros estaba esperando terminar la semana para entrar en las vacaciones de Semana Santa, pero cinco disparos por la espalda se interpusieron en su camino.
“Me gustaba la forma que tenía de trabajar”
Timoteo Arrecis
, padre de la víctima
Además, esperaba participar como seleccionado de fútbol en los juegos ministeriales que se celebrarán el próximo mes de abril porque ese deporte era una de sus pasiones.
Miércoles de luto
Las escuelas del casco urbano de Chiquimulilla cerraron este miércoles en homenaje a su compañero fallecido, incluyendo el Colegio Evangélico El Shaddai, donde Gustavo impartía clases de matemáticas por la tarde desde hace 10 años.
El maestro Gustavo Arrecis está siendo velado en el pueblo. (Foto: Wilder López/Soy502)
“Nos va a costar reemplazar a Gustavo”, lamentó la directora de la escuela que recordó cómo Gustavo quería renunciar en su primer año en la docencia.
El Shaddai se encuentra en su semana de celebración, que casualmente cumple 33 años, los mismos que tenía el maestro Arrecis.
Los bailes y fiestas del pueblo fueron suspendidas por luto. (Foto: Wilder López)
En otras escuelas, los maestros acudieron a examinar pero no impartieron clases por respeto a su compañero fallecido.
Apoyo psicológico
Anselmo Martínez, uno de los supervisores del ministerio de Educación (Mineduc) en esta área de Santa Rosa, explicó que se está conformando una comisión para brindar apoyo psicológico a maestros, alumnos y padres de los niños que vivieron la brutal escena del crimen.
“Fue un impacto muy duro para todos”
Rosalinda López
, supervisora educativa.
El supervisor espera que pronto las cosas vuelvan a la normalidad con el tiempo y recomendó que lo mejor sería que los niños retomaran las clases en un edificio alternativo hasta que volvieran a tener confianza para regresar a las instalaciones del kilómetro 122 de la CA-2 dirección a El Salvador.
“Fue impacto muy duro para todos”, comentó Rosalinda López, la supervisora del sector donde se encontraba la escuela y que tuvo que llegar a la escena del crimen después de recibir la llamada entre llantos de la directora.
Esta misma tarde, Gustavo Arrecis será enterrado en el mismo pueblo.
