Honduras es el país más atacado por la plaga del gorgojo descortezador, donde hay más de 390 mil hectáreas de pino afectadas. Desde su llegada al poder Jimmy Morales ha mostrado su preocupación por la expansión de la plaga en el vecino país y la posibilidad que afecte a Guatemala, hasta el punto de llegar a plantearse no asistir a su primera cumbre presidencial en Ecuador para atender la emergencia.
Sin embargo, el gorgojo del pino no es un desconocido para los bosques guatemaltecos. Según los datos históricos que registra la mesa interinstitucional que evalúa la crisis ambiental, en el país se han visto afectadas desde 1975 un total de 106 mil hectáreas.

Su presencia histórica se ha registrado en el altiplano, la zona más afectada, la Sierra de las Minas, Huehuetanango, Petén, Totonicapán, Chimaltenango y Quetzaltenango.
El pasado 17 de febrero, el presidente Morales realizó un sobrevuelo por la zona donde señaló la posibilidad de declarar el estado de emergencia. "La plaga podría acabar con el 50% de los árboles de la Sierra de las Minas", señaló Jimmy.
Por su parte, el coordinador en el área de Capacitación del Instituto de Agricultura, Recursos Naturales y Ambiente (IARNA) de la Universidad Landívar, César Sandoval, apuntó que esa sierra no es zona fronteriza como para estar preocupados. "La plaga no avanza kilómetros, son desplazamientos cortos", señaló el ingeniero.
El gran peso del gorgojo sumado a su pequeño tamaño (4 milímetros) no le permite volar una distancia de más de 40 metros, aunque en condiciones favorables de viento puede desplazarse varios kilómetros.

Actualmente, el gorgojo afecta entre 200 y 300 hectáreas en el país que es algo estable en los ecosistemas. Aunque según el ingeniero es una cifra subestimada y se basa en el monitoreo de las administraciones y los propietarios de zonas boscosas. Asimismo, una árbol afectado puede sanearse.
Según el ingeniero, lo importante es que Guatemala cuente con bosques saneados y esa labor le corresponde al Instituto Nacional de Bosques (Inab) con el apoyo del poder local y el sector privado. "Un árbol sano no se ve afectado por el gorgojo", explicó.
Las acciones
La mesa interdisciplinar tiene detallado un plan de acción con un presupuesto 8 millones 70 mil quetzales para todo este 2016 que se definirá en la hoja de ruta final de la reunión del próximo martes y que servirá de antesala al encuentro de vicepresidentes de los países del triángulo norte. El plan se enfoca en dos áreas: una de prevención y control y la otra de manejo forestal.

Una de las medidas de prevención que proponía la mesa técnica era talar una franja de 70 metros de ancho para evitar que la plaga de Honduras llegara a los bosques guatemaltecos.
En ese sentido, Sandoval añadió que la tala "no es tan necesaria" si no llega. "Existen otras medidas como acordonar una área, ver cómo evoluciona y evitar que supere ese cordón". Además, los medios locales hondureños reportan la disminución de velocidad en la expansión del insecto.
Así enfrentará Guatemala la amenaza nacional del gorgojo https://t.co/0u8oInr4vH pic.twitter.com/m56kLHR66x
Después de una reunión en Esquipulas, las autoridades han decidido apartar la idea de la tala y atacar directamente los focos. "Hemos llegado a la conclusión de que la tala puede suponer un daño ecológico importante", apuntó el ministro de agricultura, Mario Méndez.
Asimismo, los daños forestales como talas excesivas o incendios provocan un descontrol ambiental porque se matan a los enemigos del gorgojo que mantienen el equilibrio biológico.
Por su parte, el vicepresidente Jafeth Cabrera destacó al término de la reunión de Esquipulas la importancia de monitorear los 140 puntos ciegos en la frontera con Honduras para que no llegue al país madera contaminada para el comercio.
El insecto
El gorgojo pertenece a la familia de los insectos coleópteros. Se trata de una especie muy común que vive en los bosques de pinos en la región.
Su período de vida no supera los 45 días y evoluciona en cuatro fases: huevo, larva, pupa e insecto. En períodos de 40 días, después de su reproducción, las poblaciones crecen el doble ya que permanecen bajo la corteza.
Las larvas se alimentan de la parte tierna del arbol y necesitan un ambiente de menos de 38 grados para poder desarrollarse.
La plaga se identifica porque las hojas y la corteza del árbol se van poniendo amarillas y posteriormente rojizas. Además en el troco se acumulan grumos blancos de resina.





