Con una carta en la que invita a su familia a que sea participe de la lucha por la justicia en el caso de la adjudicación anómala del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) a Droguerías Pisa, se despidió Ángela Molina quien falleció el pasado 17 de julio por peritonitis.
Ese mismo día, murió Wendy Gómez cuya familia considera que su partida es por la voluntad de Dios y con quien la cifra de víctimas mortales por el servicio de diálisis peritoneal continua ambulatoria de Pisa, se elevó a 26 en solo cinco meses.
Ángela, quien vivía con sus padres en Jutiapa, fue diagnosticada con deficiencia renal cuando apenas llegaba a la mayoría de edad y 12 años después, a la edad de 30 pereció por la enfermedad.
El hermano de Ángela, Geovanny Molina, comenta que ella, a pesar de todo, tenía una vida normal e incluso trabajaba, pero a partir del tratamiento de Pisa, empezó a mostrar un deterioro en su salud.
Asegura que su hermana, quien fue trasladada a hemodiálisis en los últimos días, se quejaba de mucho dolor cuando se practicaba la diálisis peritoneal y pronto desarrolló la infección que ameritó que fuera internada en el IGSS de la zona 9.
Molina indica que otra de las peticiones de su hermana era que se presente una denuncia contra el Seguro Social, pues aseguraba no recibir una atención adecuada.
A sus 38 años, un examen fue todo lo que le faltó a Wendy para graduarse como abogada, tras cerrar con esfuerzo el pensum de derecho en la Universidad de San Carlos.
Su esposo, Job Paredes, con quien la víctima compartió 16 años de matrimonio y quien se constituyó en su apoyo durante el padecimiento.
Paredes destaca que 4 o 5 días después de ser trasladada a Pisa, Wendy empezó a decir que estaba muy cansada y a perder el ánimo que la caracterizaba, por lo que se vio en la necesidad de ser internada. El motivo era una peritonitis que a pesar del tratamiento y de pasar más de dos meses en el hospital, no cedió.
Según Sorayda Macz, titular de la Asociación de Pacientes Renales de Diálisis Peritoneal del IGSS, a partir de la intervención de Pisa 26 afiliados han fallecido por peritonitis.
Por el supuesto fraude en el contrato referido, 17 personas, entre ellas, personal del IGSS y de Pisa, así como el hijo de la magistrada de la CSJ, Blanca Stalling, fueron ligadas a proceso el pasado 26 de mayo.
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