La embajada de los Estados Unidos anunció que realizarán pruebas de polígrafo a empleados de la Administración Tributaria, como medida para reducir los niveles de corrupción que aún existen dentro de dicha institución.
Rodrigo Montúfar, miembro titular del Directorio de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), explicó que todo el Directorio, por unanimidad, aceptó el apoyo del Gobierno de Estados Unidos para realizar las pruebas.
Montúfar explicó que iniciarán con la planificación que determinará qué personal sería evaluado, así como cuándo comenzarán las pruebas de polígrafo.
El miembro del Directorio explicó que se respetará el principio constitucional de que a nadie se le puede obligar a declarar contra sí mismo, pero no detalló qué harán con el personal que niegue participar en el proceso.
Por su parte, Elder Fuentes, superintendente interino, señaló que se someterá a las pruebas del polígrafo si así lo decidiera el Directorio.
Prórroga a candidatos
Montúfar también anunció que a los tres participantes del proceso para elegir al nuevo jefe de la SAT se les dará una prórroga de tres días para presentar constancias de algunos documentos que les falta a los tres.
De esta cuenta, el proceso se retrasa mucho más, tomando en cuenta que si uno de los tres no cumple con los requisitos todo el proceso se caerá, ya que la Ley Orgánica de la SAT estipula que debe presentarse una terna al presidente Otto Pérez.
Baja recaudación
La misión del nuevo jefe de la SAT será revertir la tendencia a la baja de la captación de impuestos, ya que esta ha tenido un comportamiento negativo en los últimos meses, ya que al cumplirse 5 meses del año, la recaudación cerró en 20 mil 998.4 millones de quetzales.
En este sentido existe una brecha de 1 mil 861 millones de quetzales, ya que la meta al quinto mes era de 22 mil 859.3 millones de quetzales.
Montúfar enfatizó que todo está bien dentro de la Administración Tributaria y que es falsa la percepción que haya que construir algo que esté destruido ya que esta funciona con normalidad.
Saúl Figueroa, viceministro de Finanzas, explicó que aún es muy pronto para determinar que la brecha sea esa en realidad y no quiso adelantar si al final del año necesitarán financiamiento.
