El presidente electo Bernardo Arévalo propone ampliar el tamaño del Gobierno, pero también emprender una búsqueda y eliminación de las plazas fantasma.
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Para el mandatario electo, el Gobierno tiene un problema de plazas fantasma, pero también de distribución y prioridades, así lo manifestó en la entrevista que ofreció a Soy502 días previos a la segunda vuelta electoral.
Sin embargo, aseguró que no sólo se trata de plazas fantasma, sino que hay personas que están contratadas y que "no llegan los requisitos" para el puesto que están cumpliendo.
Arévalo indicó que "una de las primeras medidas" que impulsará en los primeros 100 días de su Administración, será un censo de las plazas que existen en el Gobierno, con el propósito de identificar no sólo si los empleados estatales llegan a trabajar, sino que verificarán si cumple con las calidades y requisitos que establece el puesto que están cumpliendo.
"Queremos identificar lo más rápido posible dónde están esas plazas fantasma, que pueden ser plazas en donde se nombra a alguien que recibe un sueldo, pero esta persona nunca se presenta a trabajar porque tiene autorización, muchas veces porque le da (un porcentaje de su salario) a diputado o al funcionario que le consiguió el puesto o pueden ser personas que no cumplen con los requisitos para ocupar la plaza", manifestó.
Según el presidente electo, uno de los ministerios en los que han tenido conocimiento de la contratación de plazas fantasma es el de Agricultura, Ganadería y Alimentación.
"Hay muchos técnicos agrícolas y muy capaces, pero también hay contadores y secretarias en puestos de extensionistas agrícolas y eso no puede estar pasando", subrayó.
"Destitución inmediata"
Realizar un censo de las plazas que existen en el Gobierno no es nuevo. Incluso, el expresidente Jimmy Morales efectuó uno, que al final no fue incluyente en la toma de decisiones.
Al respecto, Arévalo aseguró que la diferencia es "la voluntad política", pues, a su criterio, Morales "no tenía ninguna intención de hacer algo con la información" recabada, mientras que ellos sí piensan utilizar el análisis de las plazas fantasma que localicen para tomar decisiones.
Cuando se le cuestionó sobre la forma en que actuarán al respecto, de manera tajante respondió que será "una destitución inmediata", aunque reconoció que "todo tiene un curso legal... no se actuará de manera arbitraria, pero si hay una plaza de una enfermera y lo que se tiene es una contadora, hay un problema... y ese problema impide que haya calidad de personal en el Gobierno".