Esta mañana los padres de Edward Alexander Aldana Fuentes, fallecido en la piscina del Liceo Javier, presentaron una queja administrativa al Ministerio de Educación (Mineduc) contra el supervisor Julio Pérez Gutiérrez
La carta está dirigida al Ministro de Educación, Oscar Hugo López Rivas, y en la misma le manifiestan estar convencidos que la muerte de Alex “pudo evitarse si se hubiera efectuado una supervisión adecuada a las instalaciones del establecimiento”.
El informe sobre las instalaciones del Liceo Javier se emitió el 28 de abril de 2016 y en el mismo resalta que la infraestructura del establecimiento “reúne las condiciones óptimas para el proceso de enseñanza-aprendizaje”
La abogada de la familia Aldana Fuentes, Débora Ávila, explica que la muerte de Alex “no hubiera sucedido si las supervisiones que hace el Mineduc se hicieran a conciencia”.
De acuerdo al reglamento del Mineduc elaborado en 2007 “Criterios Normativos para el Diseño Arquitectónico de Centros Educativos Oficiales” la profundidad mínima que debe tener una piscina dentro de un colegio es de 1.05 metros y la máxima debe ser menor a 1.50, “la del colegio tiene 2.70… esa piscina desde el 2007 no tendría que estar funcionando”, manifiesta Ávila.
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