Un millón de dólares habría sido el valor que pagó Roxana Baldetti por el edificio Valser, con el que canceló los honorarios de su primer abogado defensor, Mario Cano, situación por la que el profesional del derecho ahora enfrenta proceso penal.
La cifra la reveló Juan Carlos Monzón en el tercer día de su ampliación de declaración en el caso Cooptación del Estado. El ex secretario privado de la exvicemandataria dijo que no conocía a Cano, solo lo vio hasta una audiencia.
¿Cómo fue la compra?
Juan Carlos Monzón contó que Roxana Baldetti quería construir una sede para el Partido Patriota similar a la del partido PRI de México para cuando salieran del poder.
De ahí surgió el interés por comprar un inmueble y fue por eso que se adquirió el edificio ubicado sobre la 6.ª avenida de la zona 9, que le ofreció Jorge Balcárcel, el amigo de uno de los hijos de la exfuncionaria.
En el inmueble se ubicaba el despacho del abogado Francisco García Gudiel, quien fue el primer abogado de Monzón y quien era el representante de la familia que vendía el edificio.
El ahora colaborador eficaz indicó que se reunió con la propietaria, a quien identificó como Liliana Valenzuela Serrano, y que pactaron la compraventa por un millón de dólares.
Monzón aseguró que el edificio se le vendieron con todo y la empresa de nombre Valser, que es la fusión entre los apellidos Valenzuela y Serrano.
El edificio se pagó con la comisión por adjudicar a Raúl Castillo y Castillo como corredor de la póliza del seguro del Aeropuerto Internacional La Aurora.
El edificio nunca estuvo a nombre de Roxana Baldetti, se mantuvo a nombre de Valser.
El seguro del aeropuerto
Monzón aseguró que Raúl Castillo le propuso el negocio del reaseguro del aeropuerto debido a que la póliza estaba vencida.
El contrato totalizaba Q36 millones y por esa adjudicación Roxana Baldetti recibió de comisión un millón de dólares.
- LA VERSIÓN DE MARIO CANO
Edificio pasa a Mario Cano
El exempleado de Baldetti siguió diciendo que su exjefa, "cuando supo su situación", decidió ya no donar el edificio al Partido Patriota.
Los planes cambiaron y la exvicemandataria le pidió a su exsecretario que lo remodelara para que ahí funcionaran las oficinas que ocuparían ella, Otto Pérez y el mismo Juan Carlos Monzón al dejar el poder.
Monzón dijo que, cuando se destapó el caso La Línea y estaba prófugo, se desentendió de todo y que supo que el edificio había pasado a manos del abogado: "Me entero de que había sido forma de pago para el licenciado Mario Cano (...) yo no lo conozco a él, jamás lo había visto en mi vida".
En su primera declaración, antes de ser ligado a proceso por lavado de dinero, Cano aseguró que el inmueble se lo entregó Baldetti como un "regalo" que no cuestionó al ser su abogado defensor.
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