El fútbol no deja de sorprender al mundo con jugadas que pocas veces podrán repetirse. Algunas quedarán para la memoria por su destreza, pero otras serán recordadas como las más divertidas o ridículas.
Esta vez fue el turno de dos equipos que disputaban los dieciseisavos de la Copa de Estonia. El Paide Linnameeskond se enfrentaba al FC Levadia. El árbitro marcó el inicio del partido, los jugadores del Paide tocaron la pelota hacia atrás, mientras sus rivales se acomodaban en la cancha.
Mientras los delanteros del Levadia se acercaban al balón, el otro equipo lo enviaba cada vez más atrás, pero ocurrió lo inesperado en tan solo 14 segundos del primer tiempo.
El defensor Matin Kase mandó un pase a su portero, pero el toque fue demasiado fuerte y fuera de la ubicación de su compañero, quien nada pudo hacer para evitar el autogol más extraño de los últimos tiempos.
Los integrantes del FC Levadia no tuvieron más opción que festejar la anotación, sin que alguno de ellos hubiese tocado la pelota. Al final, se quedaron con la victoria por marcador de 3 a 1 sin pensar que empezarían el juego con una ventaja tan tempranera.
*Tomado de Infobae
