Es innegable la pérdida futbolística de la Selección Argentina con la, hasta ahora firme, renuncia de Lionel Messi a volver a vestir los colores de su país natal. Sin embargo, detrás de esta gran decisión se esconden consecuencias económicas muy graves para la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), cuyo presidente se encuentra apartado del cargo por la justicia ordinaria en un proceso que podría significarle la exclusión de las competiciones internacionales a la albiceleste por la intervención estatal.
El diario Ámbito recoge un estimado facilitado por un dirigente de la Asociación, según el cual serían unos 200 millones de dólares los que se perderían desde ahora hasta el Mundial de Qatar 2022 tan solo por partidos amistosos, en los que la albiceleste cobra 1 millón de dólares por partido, y que se reducen hasta en un 40 por ciento si “La Pulga” no está.
Aunque los alcances de la decisión son todavía insospechados, también se verían afectados quienes viven a la sombra de su imagen y se ven repentinamente privados de la posibilidad de continuar asociándola con sus marcas.
No solo se trata de las compañías que tienen relación directa con él (Messi), sino aquellas que usan su imagen indirectamente como socias de la AFA:
Quilmes, la popular marca de cerveza Argentina, una empresa de telefonía, una tarjeta de crédito, un banco, una aseguradora y hasta una petrolera.
Las pérdidas en este caso ascenderían hasta los mil 200 millones de dólares, de acuerdo con un informe de Euroaméricas Sport Marketing citado por el diario Vanguardia. Lo que es más grave, tal como lo advierte uno de los analistas, es que “el 82 por ciento de las empresas explican que están con la Selección porque hoy es sinónimo de Messi”, lo cual abre una gran interrogante de incertidumbre sobre lo que será de ambas partes con esta nueva contingencia.
Evidentemente la primera en pérdidas es Adidas, que pierde por ambos lados pues tiene contrato con la Selección y con el jugador, lo cual le significa importantes entradas que se proyectan a futuro, sobre todo para eventos como los dos mundiales siguientes y los Juegos Olímpicos de Río 2016.
La revista Forbes se permite dudar sobre la renuncia definitiva del “crack” debido a lo que significan esos compromisos tan solo para la marca de las tres franjas: “¿Entonces Lionel Messi se retira de la competición internacional? Lo dudo. No si Adidas tiene algo que decir al respecto”, sentencia.
Y es que el efecto Messi se escapa de la razón de muchos. Más allá de lo futbolístico, tan solo su presencia en un certamen como la Copa América Centenario le reporta masivas audiencias y ganancias millonarias a las cadenas televisivas que transmiten los juegos de la Selección Argentina.
Un efecto que es la base de gran parte de la pauta que se ve potenciada con la visibilidad televisiva y que ahora sufre un fuerte remezón por la intempestiva decisión del 10 argentino.
Con información de Futbolete
