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Los habitantes de Galicia luchan cuerpo a cuerpo con los caballos salvajes. (Foto: Javier Arcenillas)
Los caballos son traidos del campo a una plaza cerrada. (Foto: Javier Arcenillas)
Los encargados de cortarle las crines a los caballos se denominan Aloitador. (Foto: Javier Arcenillas)
Las personas, aunque corren riesgos mezclándose con los caballos salvajes, han vuelto la actividad una tradición. (Foto: Javier Arcenillas)
La plaza acondicionada para realizar la tradición es abarrotada por habitantes de la región y turistas que visitan la región para disfrutar del espectáculo. (Foto: Javier Arcenillas)
La Rapa das Bestas de este 2015, se reunieron 400 caballos salvajes para realizar el corte de las Crines de estos ejemplares. (Foto: Javier Arcenillas)
La lucha cuerpo a cuerpo puede durar varios minutos hasta que el animal salvaje es llevado al suelo para cortarle las crines. (Foto: Javier Arcenillas)
Las colas de los caballos también son recortadas por los participantes. (Foto: Javier Arcenillas)
Los caballos son liberados luego de realizar la tradición. (Foto: Javier Arcenillas)
Los habitantes estan tan acostumbrados a la tradición que no ven peligro en participar. (Foto: Javier Arcenillas)
Los más pequeños se asombran del espectaculo. (Foto: Javier Arcenillas)
Las mujeres también se arriesgan por el bienestar de los animales. (Foto: Javier Arcenillas)
Algunos pobladores salen heridos al tratar de domar a las bestias. (Foto: Javier Arcenillas)
La lucha entre bestia y hombre en el fondo es algo que los pobladores de esta provincia gallega hacen para mejorar la salud de los equinos salvajes.
