Expertos mencionan que este pequeño detalle es crucial para garantizar el buen funcionamiento y la durabilidad del candado.
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A primera vista, el pequeño agujero en la parte inferior de muchos candados puede parecer solo un detalle de diseño. Sin embargo, detrás de esa pequeña abertura se esconde una función importante que pocos conocen.

Una de las funciones principales del agujerito es actuar como sistema de drenaje, permitiendo que el agua acumulada dentro del mecanismo se drene y evitando así la oxidación y el deterioro del candado.
El pequeño agujero en la parte inferior tiene varias funciones importantes.
- Drenaje: permite que el agua acumulada dentro del mecanismo se drene, evitando la oxidación y comprometer su funcionamiento.
- Mantenimiento: permite la aplicación de lubricantes para mantener las piezas móviles y operativas.
- Desbloqueo técnico: en algunos modelos, permite abrir el candado con una llave especial en caso de emergencia.

A medida que pasa el tiempo, el polvo, el óxido y las temperaturas extremas pueden dañar el mecanismo interno del candado, lo que puede hacer que se vuelva más difícil de abrir y cerrar.
Sin embargo, gracias al agujerito, es posible aplicar lubricantes especiales directamente en el interior del candado, lo que ayuda a mantener las piezas móviles y operativas.