La comunidad de Saq' Utiw, en San Andrés Semetabaj, alberga la legendaria "Casa Misteriosa" o "La Pila del Dragón", una estructura de 150 años que ha alimentado mitos sobre tesoros ocultos y ruidos nocturnos.
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En la comunidad de Saq' Utiw (Coyote Blanco), a aproximadamente un kilómetro de la cabecera municipal de San Andrés Semetabaj, se encuentra una vivienda de más de 150 años conocida por los vecinos como "La Casa Misteriosa" o "La Pila del Dragón". Esta construcción de adobe y techo de teja forma parte de la memoria histórica de la región.
Según relatan los pobladores, a finales del siglo XIX y principios del XX allí vivió un hombre considerado uno de los más adinerados de la zona, quien almacenaba grandes cantidades de dinero en costales guardados en el "tapanco" (cielo falso de madera). La tradición oral indica que, al finalizar la temporada de lluvias, mandaba a sus trabajadores a sacar el dinero para secarlo al sol y protegerlo de la humedad.
Rumores, curiosos y relatos nocturnos
Con el paso de los años, la casa quedó rodeada de historias que despertaron la curiosidad de vecinos y visitantes. Algunas personas aseguran haber escuchado ruidos extraños durante la noche, como pasos, lamentos o el sonido de alguien lavando en la antigua pila frente a la cocina.
Las leyendas populares también sostienen que el antiguo propietario habría enterrado parte de su fortuna dentro de la propiedad, lo que motivó que durante décadas varias personas intentaran excavar en busca de un supuesto tesoro.
La historia del antiguo dueño
Luis Osvaldo Estacuy Estacuy, bisnieto del propietario original, explicó que su bisabuelo, Juan Estacuy Reyes, falleció en 1954 a los 77 años. Desde entonces, la casa quedó abandonada y, con el paso del tiempo, gran parte de la estructura se derrumbó por los terremotos y el deterioro natural. Actualmente, solo se mantiene en pie el área de la cocina, el espacio destinado para las cenas y la pila conocida como "del Dragón".
Según la tradición familiar, Juan Estacuy Reyes mantuvo una relación con una mujer originaria de la costa sur. Tras la separación, habría caído en profunda tristeza y decidido quitarse la vida dentro de la vivienda, hecho que contribuyó al misticismo que rodea al lugar.
La Pila del Dragón
Uno de los elementos más llamativos de la casa era una pila construida con ladrillo quemado de estilo colonial, adornada con una cabeza de dragón. Con el tiempo, la pila fue retirada, pero sigue siendo un símbolo del estatus económico del propietario, quien también poseía propiedades en San Lucas Tolimán y en la costa sur del país.
Un lugar marcado por la tradición
El sitio donde se ubica la vivienda, Saq' Utiw, significa "Coyote Blanco" en el idioma local. La tradición oral asocia el lugar con la aparición de un coyote de color blanco, lo que ha alimentado el misticismo que rodea a la antigua construcción.
Hoy, los restos de la Casa Misteriosa continúan siendo un referente local, donde se entrelazan historia, leyendas y la identidad cultural de San Andrés Semetabaj.
