El excandidato a la presidencia, Roberto Arzú, negó que durante su cargo como embajador del Gobierno de Jimmy Morales en Sudamérica se hayan efectuado los acercamientos y contactos para la compra de los polémicos aviones Pampa III, y anunció que le cuestionará al presidente de Argentina, Mauricio Macri, cómo se fraguó la negociación.
En una conversación con Emisoras Unidas, Arzú explicó que su cargo en el gobierno de Morales, como embajador ad-honorem, fue para atraer inversiones y asegura que jamás conversó con Macri sobre la compra de dichas aeronaves.
"Mi cargo fue ad honorem y en mi paso como embajador para esa área fue el de atraer inversiones. Nunca, en mis 25 años de amistad con Macri pensamos, ni se nos pasó por la mente la compra de los aviones, jamás pensamos en hacer esta atrocidad", explicó Arzú.
Estoy en total desacuerdo en la decisión de la compra de dos aviones militares por el gobierno de Guatemala. Primero, por el monto que es de 28 millones de dólares. Segundo, por el uso que se les va dar. Tercero, por el récord de los aviones. pic.twitter.com/AwZ7nteMRT
- RECUERDA:
Reconoció que hablará con Macri sobre cómo surgieron las negociaciones ya que para Guatemala era más fácil recibir donaciones o comprar equipo militar a Estados Unidos o del propio Israel.
"Llamaré a mi amigo para saber como fue esta negociación. Estoy seguro que no le cayeron en gracia mis declaraciones en redes sociales, de algo que me parece una atrocidad, el culpable no es Macri, el culpable es nuestro presidente", reconoció Arzú.
FAdeA exportará 2 #PampaIII a Guatemala. La operación se cerró por un monto total de 28 millones de dólares e incluye los servicios de capacitación y mantenimiento de la aeronave https://t.co/bfs7KNFbpt ✈️ pic.twitter.com/ZN9rKq7ltd
Agregó que existen otras necesidades y que no se debería gastar en aviones para la lucha contra el narcotráfico ya que lo mejor es "sacar al Ejército a las calles como yo lo prometí en campaña", finalizó.
Guatemala confirmó por medio del Gobierno de Jimmy Morales la compra de dos aviones tipo Pampa III por 28 millones de dólares que servirán para el resguardo de las fronteras y la lucha contra el narcotráfico.
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La compra ha sido cuestionada por diversos sectores y la sociedad civil por evitar procesos legales que se establecen en le Constitución Política de Guatemala, la Ley de Compras y la de la Contraloría General de Cuentas.
