Las hermanas Ana y María se conducían por carretera a El Salvador. Eran las 2:00 de la mañana y venían de una larga noche de celebración. Primero un concierto y luego, debido a que aún era temprano, decidieron pasar unas horas más de fiesta en una discoteca ubicada en kilometro 25. Lo que pasaría después, les cambiaría la vida.
Iban en dos carros porque no se habían podido coordinar durante la tarde. Un error de logística que al final les jugó a su favor. Iban por el camino (una detrás de la otra) cuando Ana, aunque sobria, se quedó dormida y perdió el control del auto. María se libró pero pudo observar en su retrovisor cuando su hermana salió del camino e impactó en el arriate central.
De un instante a otro, el auto estaba destrozado, inmóvil, bajo la luz de los postes de la calle y ante la mirada impotente de María. El accidente, aunque desastroso, está lejos de ser algo fuera de lo común en esta área.
Fuertes accidentes
“Este sector no es el lugar en el que más accidentes de tránsito se registran, pero sí es dónde se producen los más letales”, explica Héctor Morales, presidente de la Asociación a favor de la Prevención y Atención a la Seguridad Integral en el Tránsito (Apasit). Esta es la única asociación que trabaja por la seguridad en el tránsito de la ciudad y tienen claro qué factores se mezclan en esta carretera para convertirla en escenario de accidentes viales.
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“Es un área que tiene varias características”, inicia su exposición el presidente de Apasit. “Es recta, incluso fue un espacio usado para carreras clandestinas de automóviles”, entre el kilómetro 18 al 25 especialmente. “No hay muchos pasos a desnivel. Asimismo, en los cruceros se dan accidentes por su diseño”, afirma.
Todas estas condiciones dan un solo resultado: altas velocidades. “La velocidad es el factor de riesgo más importante”, dice Morales. “No es solo el tema del alcohol”, agrega. En su opinión, es una serie de factores los que se combinan. Entre ellos se destaca la mala iluminación de la carretera y, como lo llama el Departamento de de Tránsito de la Policía Nacional Civil (PNC): el factor humano.
Este se define como cualquier distractor, por ejemplo el teléfono. Según estima el Departamento de de Tránsito, el 30% de los accidentes se deben al factor humano.
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Según cifras de la PNC, hasta el mes de agosto de 2016 se habían reportado en todo el país más de 6 mil 40 hechos de tránsito que dejaron un saldo de 1 mil 708 muertos y 8 mil 75 heridos, concentrados principalmente en el departamento de Guatemala. En promedio, las personas accidentadas tienen entre 18 y 30 años de edad y la principal causa de accidentes es la velocidad.
Aunque el carro de Ana fue una pérdida total, se salvó, y casi sin ningún rasguño. Aún no está muy claro qué factores jugaron a su favor, pero la lección que aprendieron esa noche la recordarán de por vida.
