El árbitro rumano Ovidiu Hategan se enteró de la muerte de su madre en el descanso del partido entre Alemania y Holanda, pero completó el partido a pesar de la terrible noticia y acabó siendo consolado por los futbolistas.
La Federación de Fútbol de Rumanía confirmó la muerte de la madre del árbitro. La Federación Alemana, que era local en el duelo disputado en Gelsenkirchen, ayudó a Hategan, de 38 años, a volver a su casa lo antes posible.
Algunos futbolistas se dieron cuenta de que algo le sucedía al árbitro, que rompió a llorar tras el pitido final, y el defensor holandés Virgil van Dijk le consoló.
¡GESTO HUMANO!
El árbitro rumano, Ovidiu #Hategan se enteró al medio tiempo del partido #Alemania vs #Holanda que su madre había fallecido. Al término del partido, el jugador holandés #VanDijk se le acercó, le deseó fuerza y felicitó por su trabajo.#FechaFIFA pic.twitter.com/Y8kq8FChvf
"Estaba llorando porque su madre acaba de morir", dijo Van Dijk. "Le di mi apoyo y le dije que había arbitrado bien. No fue gran cosa, pero espero que le haya ayudado".
El partido, de la última jornada de la Liga de Naciones de Europa, acabó 2-2 y Holanda se clasificó a la "final four" del torneo recientemente creado por la UEFA.
*Con información de Marca






