La presidenta de la Comisión de Salud del Congreso sufrió agresiones durante una fiscalización en Salamá.
EN CONTEXTO: Sindicalistas agreden a la diputada Evelyn Morataya en Baja Verapaz
Un día después de que la diputada Evelyn Morataya sufrió agresiones verbales y físicas por parte de sindicalistas de Salud, en Baja Verapaz, la Junta Directiva del Congreso condenó el hecho.
Por medio de un comunicado, el ente colegiado presidido por Nery Ramos lamentó y rechazó "los incidentes que impidieron la labor de fiscalización" de la parlamentaria.
"Desde que tuvimos conocimiento de los hechos ocurridos en Baja Verapaz, nos comunicamos con la diputada para expresarle nuestra solidaridad y apoyo en su trabajo", reza el documento, en el cual se cita a Ramos.
En el texto se hace ver que Morataya se disponía a fiscalizar el hospital de Salamá, debido a varias denuncias recibidas, "pero personas impidieron que ingresara y realizara su trabajo".
La Junta Directiva, en el comunicado, recuerda que la mencionada función es parte del trabajo de los legisladores y está respaldada por la Constitución Política de la República y la Ley Orgánica del Congreso.
Quedó grabado
El incidente quedó grabado, pues es el equipo de la parlamentaria efectuaba una transmisión en vivo, como suele hacer cada visita a hospitales que ha estado fiscalizando, en su calidad de presidenta de la Comisión de Salud.
En videos que se han hecho virales en las redes sociales se aprecia como un grupo de mujeres, principalmente, identificadas como sindicalistas de Salud, gritan y empujan a Morataya para evitar que ingrese al recinto donde haría la supervisión.
Uno de los hechos que buscaba comprobar era que no se permitía la toma de posesión del nuevo director del centro asistencial de Salamá; sin embargo, no pudo cumplir con la tarea.
Después de varios minutos de gritos en su contra y de que hasta quemaran cohetillos para celebrar que no la dejaron entrar, la diputada optó por retirarse del lugar y presentar una denuncia penal ante el Ministerio Público.