Hay una frase popular que dice que del amor al odio hay un solo paso y parece aplicarse adecuadamente a la relación del exbinomio presidencial Otto Pérez y Roxana Baldetti cuyo motivo de separación podría resumirse en dos palabras: La Línea.
Los días de complicidad y en los que el exgobernante aseguraba que estaba dispuesto a "meter las manos al fuego" por su compañera de fórmula han quedado muy lejos, prueba de ello es que este 10 de marzo durante la audiencia del caso del fraude en dos contratos para el saneamiento del lago de Amatitlán, Baldetti y su abogado insistieron en que el juez tomara en cuenta en el proceso, una carta en la que Pérez le ordenaba que se hiciera cargo del proyecto.
Asimismo, totalmente opuesto a lo que Pérez dijo en septiembre de 2013 durante una entrevista con el periodista Jorge Ramos; la exvicepresidenta afirmó, al ser consultada sobre si respaldaba al exmandatario: "yo no meto las manos al fuego por nadie".
Cabe destacar que en agosto de 2015, luego que la exfuncionaria fuera detenida por su supuesta implicación en la red de defraudación, conocida como La Línea, Pérez evadió la pregunta sobre si sostenía su postura y contestó: "eso no viene al caso ahorita".
Baldetti, por su parte insistió ante la prensa que ella atendió el proyecto de la aplicación de la fórmula al lago de Amatitlán, tras recibir una carta de Pérez en la que le ordenaba hacerse cargo del proyecto de saneamiento.
Así también, al ser cuestionada sobre si estaba al tanto de que Gudy Rivera, otro de los pilares del Partido Patriota, había sido detenido, dijo que sí se había enterado pero que desconocía "cómo le había ido al pobrecito.
Baldetti es ligada a proceso por los delitos de asociación ilícita, fraude y tráfico de influencias @soy_502 pic.twitter.com/R1dpqXD12Q
Después de figurar como la secretaria general de la agrupación política, Baldetti ha mostrado una marcada distancia con los otros líderes del partido y de su Gobierno. La exfuncionaria que permanece en prisión por el caso La Línea, fue ligada este jueves a un segundo proceso judicial por corrupción.
