Juan Orlando Hernández, será juramentado hoy como presidente de Honduras para un período de cuatro años que concluirá el 27 de enero de 2018.
Al traspasado de poder, asistirán representantes de unos 65 países, incluidos presidentes y jefes de Estado, el príncipe de Asturias y delegados de organismos internacionales.
Hernández, asume el poder de Honduras, un país que se encuentra azotado por una violencia criminal que a diario deja un promedio de 20 muertos y por la pobreza que afecta al 70 % de los 8.5 millones de hondureños.
Su antecesor, su correligionario Porfirio Lobo, asumió el poder el 27 de enero de 2010 en medio de una crisis interna política y social, y el aislamiento de la comunidad internacional en respuesta por la expulsión de Manuel Zelaya del poder y del país.
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El primero de los gobernantes en llegar al país centroamericano fue el de Taiwán, Ma Ying-Jeou, quien dijo a los periodistas que venía para "saludar al presidente (Lobo) cuando está concluyendo su mandato presidencial".
A la investidura de Hernández también asisten los presidentes de Colombia, Costa Rica, El Salvador, Panamá, Kosovo y República Dominicana, lo mismo que representantes de otros países de Norte y Suramérica, Europa y Asia y organismos internacionales.
El presidente de Guatemala, Otto Pérez no asistirá informó el gobierno guatemalteco.
Hernández ganó las elecciones generales del 24 de noviembre de 2013, por el oficialista partido Nacional de Honduras.
Las pasadas elecciones son consideradas históricas debido a que por primera vez, participaron nueve partidos políticos, cuatro de ellos surgidos tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 contra el entonces presidente Manuel Zelaya.
Uno de los cuatro nuevos partidos es el izquierdista Libertad y Refundación (Libre), cuyo coordinador es Zelaya, que ahora es diputado por esa nueva fuerza política ante el Parlamento.
el nuevo jefe de Estado, se desempeñó como presidente del Parlamento, y hereda un país que atraviesa una crisis económica sin precedentes, con una deuda interna y externa que supera los 5.000 millones de dólares.
Hernández ha prometido reducir el aparato del Gobierno fusionando algunos ministerios, cerrar oficinas que no rinden resultados, generar empleo, reducir la criminalidad y combatir la corrupción, problemas que son de vieja data.
El nuevo presidente de Honduras tiene 45 años y es el primer líder del Partido Nacional que logra un segundo triunfo consecutivo de ese colectivo desde que el país retornó a la democracia en 1980, tras casi dos décadas de regímenes militares.
Gabinete
Hernández, continuaba el domingo en la conformación de su gabinete de gobierno, quienes deberán ejecutar los programas sociales que el nuevo mandatario propuso a los hondureños en su campaña electoral.
En la nueva estructura de gobierno ya han sido oficializados varios funcionarios. Reinaldo Sánchez será ministro de la Presidencia, Jorge Lobo será ministro de Agricultura, Marlon Tábora presidirá el Banco Central, el general Julián Pacheco, director de Inteligencia; Roberto Ordóñez será ministro de Energía e Infraestructura y Rigoberto Chang Castillo, ministro del Interior.
Hernández participó el domingo en oficios religiosos en la Iglesia Católica y Evangélica donde dijo a periodistas "mi equipo y yo no seremos suficientes" y pidió apoyo.
Con información de agencias.
