Apple TV+ continúa apostando por producciones de alta calidad, aunque su alcance aún sea limitado frente a otras plataformas.
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Una de las joyas más recientes de Apple TV+ es Dope Thief: ladrones de drogas, una miniserie de crimen y drama que ha pasado casi desapercibida, pero que ofrece una propuesta sólida en guion, ambientación y actuaciones.
Esta serie está basada en la novela criminal homónima de Dennis Tafoya, publicada en 2009. Que un libro llegue a convertirse en serie siempre es buena señal: hay algo interesante en esa historia. Además, el piloto fue dirigido por nada menos que Ridley Scott —sí, el mismo director de Blade Runner y Gladiador—, y también funge como productor ejecutivo, lo que garantiza una estética cuidada y un ambiente de primera. La serie, estrenada en marzo, cuenta con solo 8 episodios, lo que la hace ideal para maratonear.
Trama que atrapa
La historia sucede en Filadelfia y sigue a dos amigos, Ray y Manny, que se hacen pasar por agentes de la DEA para robarle a pequeños traficantes. Pero las cosas se complican cuando terminan metiéndose con una organización criminal mucho más grande, enfrentando las consecuencias de sus actos. El punto de quiebre llega cuando roban una operación de narcóticos que estaba bajo vigilancia de la verdadera DEA. A partir de ahí, nadie es quien parece, y la tensión crece hasta el final.
Si te interesa, aquí está el tráiler oficial:
Actuaciones que destacan
Brian Tyree Henry, conocido por su papel como Alfred "Paper Boi" en Atlanta, interpreta a Ray, un personaje astuto que sobrevive a base de intuición y que carga con un pasado difícil de dejar atrás. Su interpretación en Dope Thief ha sido tan sólida que le valió una nominación a Actor Principal Destacado en Serie o Película Limitada o Antológica en los Emmys 2025.
A su lado está Wagner Moura, el inolvidable Pablo Escobar de Narcos, que aporta el corazón humano de la serie con un personaje lleno de defectos reales. También destaca Kate Mulgrew —la eterna capitana Janeway de Star Trek: Voyager— como la madre de Ray, en un papel que transmite esa mezcla de cariño y complejidad que todos reconocemos en nuestras propias madres.
Lo que funciona y lo que no tanto
Dope Thief brilla por evitar diálogos explicativos y dejar que la historia se cuente a través de lo que se muestra, acompañado de una ambientación que sumerge al espectador. El estudio profundo de personajes es otro punto fuerte.
Sin embargo, algunas escenas de acción llegan de forma abrupta, especialmente al final de los episodios, lo que puede romper un poco el ritmo. También hay tramas secundarias que en ocasiones pierden fuerza, posiblemente pensando en una segunda temporada.
¿Vale la pena verla?
Si se busca una serie que requiera atención, que esquive clichés y mantenga el interés con giros inteligentes y momentos inesperados, Dope Thief es una opción que no decepciona. Tiene un guion sólido, un buen balance entre drama y acción, y actuaciones memorables que hacen que valga la pena darle una oportunidad, incluso si no se cuenta con un Apple TV+ propio.
