Los colores de la bandera de Estados Unidos ya son perceptibles en La Habana, Cuba, tras la inauguración oficial de la embajada que abre un nuevo capítulo en la relación entre ambos países.

John Kerry, quien se convirtió en el primer secretario de Estado norteamericano en visitar la isla después de casi 7 décadas, fue quien presidió la ceremonia del izado de la bandera en la sede consular en cuyo alrededor se congregaron unas 700 personas.
Empero, Kerry advirtió que el gobierno estadounidense mantiene su convicción de que la mejor opción para los cubanos es una "democracia genuina" en la que el pueblo pueda "elegir libremente a sus gobernantes".
Tras la ceremonia, Kerry se reunió con el cardenal Jaime Ortega, máximo representante de la Iglesia católica en la isla, y después sostuvo conversaciones bilaterales el canciller Bruno Rodríguez.






