Mario Estrada busca salir de prisión, por ser un reo ejemplar y haberse rehabilitado, según una moción de liberación compasiva que presentó ante una corte de EE. UU.
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En un nuevo intento, desde que fue condenado en Estados Unidos a 15 años de prisión por delitos de narcotráfico, el excandidato presidencial Mario Estrada pidió a una corte de Nueva York dejarlo en libertad.
El expolítico guatemalteco presentó tal solicitud en agosto pasado, pero la acción cobró relevancia después de que se le negó una petición de libertad condicional.
Su nuevo requerimiento fue mediante una moción de liberación compasiva, que constituye la última medida a la cual puede optar un reo en EE. UU., después de haber utilizado todos los recursos administrativos permitidos en el país.
La "libertad por compasión", según el ordenamiento jurídico estadounidense, se puede aplicar cuando existen "razones extraordinarias y convincentes" para una reducción de la sentencia.
En este caso, Estrada argumenta que, aunque no tiene excusas por el daño causado, ha demostrado ser un reo ejemplar y que se ha rehabilitado. Asimismo, manifiesta haber prestado servicio como maestro dentro de la cárcel donde ha estado recluido y que no se considera dañino para la sociedad.
El expediente presentado por su equipo legal es extenso y también incluye partes médicos de su mamá, quien reside en su natal Jalapa, en los cuales se indica que tiene problemas de salud.
Rechazan argumentos
Hasta ahora, el expresidenciable no ha recibido respuesta a su solicitud, pero el Gobierno ha dejado clara su oposición para cualquier medida que permita su liberación de la cárcel.
En un memorial remitido por el Departamento de Justicia, se lee que Estrada no ha brindado argumentos válidos para optar a la libertad por compasión y que tampoco ha comprobado haber agotado los recursos administrativos para acogerse a esa figura.
Más bien, lo señalan de estar "dispuesto a vender a su gobierno, a su familia, a su gente y a tirar a EE. UU. por el desagüe", con tal de conseguir fondos para convertirse en presidente de Guatemala.
Esto en alusión al operativo que en 2019 lo llevó a ser detenido en territorio estadounidense, cuando, según él, negociaba con miembros del cartel de Sinaloa para traficar drogas hacia aquella nación, a cambio de dinero para financiar su campaña para las elecciones de ese año.
Lo que no sabía es que las personas con quienes se entrevistaba eran agentes encubiertos de la Administración para el Control de Drogas es la agencia del Departamento de Justicia (DEA, por sus siglas en inglés).
En febrero de 2020, fue condenado a 15 años de prisión, cuatro años de libertad condicional y una multa de 40 mil dólares (unos Q308 mil), que no le serán útiles para reducir su condena.
La sentencia fue dictada por el juez Jed Radkoff de la Corte del Distrito Sur de Nueva York, luego que la fiscalía Federal de Manhattan lograra demostrar que Estrada conspiró con supuestos narcotraficantes para traficar toneladas de cocaína hacia EE.UU.