A lo largo de sus 136 años de historia, Castillo Hermanos se ha comprometido con el desarrollo integral de Guatemala, demostrándolo con acciones concretas.
Una visión de desarrollo, dictada por la responsabilidad social empresarial (RSE) que ha sido parte del ADN de este grupo, la cual está compuesta por varios elementos: el primero de ellos, el fomento de oportunidades económicas y generación de empleo, así como una apuesta por la sostenibilidad, la inversión social y la ética empresarial.

Bajo la filosofía “Creemos, confiamos e invertimos en Guatemala”, Castillo Hermanos, a través de su proyección social, Fundación Castillo Córdova, ha apoyado a diferentes comunidades del país con programas de nutrición tales como: el Programa de Recuperación Nutricional y el Programa de Alimentación Escolar.
Por la experiencia que han adquirido, la empresa llegó a la conclusión de que la desnutrición, es un problema complejo y multicausal, que no se soluciona únicamente con brindar a las comunidades asistencia alimentaria, sino que, debe abordarse desde diferentes frentes como, por ejemplo, la generación de empleo, el cuidado ambiental, el fortalecimiento del sistema de salud primaria, mejoras en el hogar, entre otros.
En este contexto, el grupo se une al llamado a la acción para alcanzar el desarrollo con un compromiso de inversión para los próximos tres años que se destinarán a:
- Inversiones productivas que generarán empleos.
- Desarrollo y tecnificación de más de 100 mil pequeñas empresas que tienen vínculos con la compañía.
- Ampliación de las plantas de reciclaje de plástico PET del grupo, con el objeto de reciclar 3.5 millones de botellas de plástico al día con una derrama social para más de 25 mil persona que están en el proceso de recolección y clasificación de basura en todo el país.
Y, finalmente, una inversión de Q116 millones que se ejecutarán en los próximos cinco años para un programa integral de abordaje a la realidad sobre la desnutrición infantil en Guatemala.

Un llamado a la acción
“Guatemaltecos por la Nutrición” es un programa modelo replicable que busca romper el ciclo de desnutrición en el país y construir, en su lugar, un círculo virtuoso de buenas prácticas de salud y nutrición para favorecer al progreso de Guatemala.
Propone implementar un modelo holístico que incida en las causas que determinan la prevalencia de la desnutrición.
La iniciativa inició hace un año con el análisis de estudios sobre la desnutrición en el país y, por otro lado, con acercamientos constantes con las comunidades afectadas. También se trabajó en identificar proveedores que trabajasen el diseño y construcción de la infraestructura necesaria para hacer viable el programa.
De esa cuenta, se contrató a ARPA, una empresa española especializada en ingeniería y fabricación de equipos móviles de campaña con soluciones integrales de alimentación, logística, alojamiento, salud, agua, gestión de residuos, energía y telecomunicaciones.
Y, por último, se contrató a la Universidad Católica de América de Washington que está acompañando al proyecto mediante evaluaciones de impacto anualmente y la construcción de la línea de base de los indicadores más importantes.

Para el programa han definido los siguientes objetivos:
- Reducir en cinco puntos porcentuales y de forma sostenida la prevalencia de desnutrición crónica en las comunidades intervenidas en Huehuetenango y el de Quiché.
- Erradicar la mortalidad infantil por desnutrición aguda en las comunidades intervenidas en Huehuetenango y Quiché.
- Generar condiciones que estimulen el crecimiento económico de las comunidades y familias beneficiarias del programa.
- Estimular el cambio de conductas en el hogar que permitan la sostenibilidad de la recuperación nutricional.
- Generar evidencia técnica para definir mejores estrategias para abordar la problemática de la desnutrición.
Para alcanzar dichos objetivos, se definió un plan de trabajo que consta de cinco ejes:
- Atención de salud primaria
- Soporte nutricional
- Agua y sanamiento ambiental
- Fortalecimiento economía familiar
- Acceso a alimentos
Para lograr trabajar en estos cinco ejes, se cuenta con el apoyo del Campamento de Nutrimóviles, el cual consiste en una serie de infraestructuras modulares y móviles en las que se prestará atención nutricional y de salud primaria a mujeres embarazadas, mujeres en edad fértil y niños menores de cinco años.
El Campamento de Nutrimóviles estará apoyado por trabajo complementario extramuros, el cuál consiste en visitas domiciliares para monitoreo de peso y talla, así como talleres educativos. Estas acciones se ejecutarán por las brigadas de Guatemaltecos por la Nutrición, conformadas por las comunidades, de manera que, esta intervención, además, generará fuentes de empleo local.

La visión holística e integral de Guatemaltecos por la Nutrición complementa las acciones en salud y nutrición, con el trabajo comunitario en el manejo seguro del agua en el hogar, introducción de practicas de higiene y además promoverá acciones enfocadas en generar la mejora de las condiciones económicas y fortalecimiento de competencias en procesos de producción de alimentos.
El equipo de Guatemaltecos por la Nutrición está conformado por un médico y una nutricionista, así como un equipo de enfermeras, técnicos agrícolas, técnicos de laboratorio y técnicos en agua y saneamiento ambiental.