Si uno se equivoca, siempre es bueno tratar de enmendar las cosas. Esto es lo que quiso hacer este hombre que al abrir la puerta de su auto, hizo caer a un motociclista.
Sin embargo, al querer ayudarlo con su moto, en lugar de arreglar lo que había hecho, empeoró la cosas. Seguramente al afectado le es imposible darle las gracias, aunque tuvo todas mejores intenciones.
Al levantar la motoneta quien provocó el incidente, agarró el manubrio y sin querer aceleró, lo que provocó que el vehículo iniciara la marcha y sin control se empotrara con un auto que estaba estacionado unos metros adelante, causando serios daños a la moto y al carro.
La pregunta es: ¿quién pagaría por los daños de ambos vehículos?
* Con información La Red





