Cuando se prepara pasta, es de lo más común deshacerse del agua hervida que se ha utilizado. Sin embargo, esta podría resultar muy útil.
OTRAS NOTICIAS: La sorprendente función de las "bolsitas blancas" en las cajas de zapatos
Es habitual que cuando preparas pasta, el agua en donde la has hervido la termines tirando.
Sin embargo, existe un uso que pocos conocen y que para los chefs italianos es un truco muy valioso al estar en la cocina.
Y es que si guardas el agua después de colar la pasta y agregas un poco a la salsa que estés preparando (ya sea pesto, carbonara, boloñesa, etc.) lograrás una textura más sedosa.
Esto debido al almidón que conserva el agua tras la cocción de la pasta, además del extra de sal. Cabe destacar que basta con guardar una taza de esa agua para hacer maravillas con la pasta.
Toma en cuenta que el almidón del agua de cocción es espesante, por lo que este tip te puede resultar útil cuando la salsa te ha quedado demasiado líquida.
