Dos amanenazas de bomba han provocado la evacuación preventiva de distintos edificios del Gobierno.
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En días recientes, se encendieron las alarmas en diferentes instituciones del Estado, debido a supuestas amenazas de bomba, por lo cual se ha empezado a investigar si los incidentes tienen relación.
Francisco Jiménez, jefe del Ministerio de Gobernación (Mingob), se refirió al tema en el Congreso y, aunque evitó ahondar en detalles, aseguró que "se trabaja intensamente con el Ministerio Público".
Según el funcionario, se han establecido varias líneas de investigación, pero hizo ver que, debido a la seriedad del asunto, no se puede revelar la información.
Llamada anónima
El primero de los hechos que cobró relevancia tuvo lugar en el Hospital Roosevelt, donde el pasado 14 de agosto se evacuó a personal y pacientes, de manera preventiva, ya que se alertó sobre un presunto artefacto explosivo en el inmueble.
Autoridades de Salud indicaron en aquel entonces que se recibió una llamada anónima, en la cual se daba a conocer que había una bomba en la Unidad de Medicina Interna.
Ante la posibilidad de que fuera cierto, se coordinó con cuerpos de socorro y elementos de la Policía Nacional Civil (PNC); sin embargo, tras la debida inspección se descartó tal extremo.
Eso no impidió los escenarios de tensión y nerviosismo en el lugar, lo cual se evidenció en varios videos que circularon en las redes sociales.
También en el Palacio
Dos semanas después, el pasado 29 de agosto se activó el protocolo de emergencia del Palacio Nacional de la Cultura y se solicitó la presencia de la unidad antiexplosivos de la PNC.
Las autoridades fueron notificadas de la colocación de una bomba en las instalaciones, por lo cual la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia (SAAS) ordenó cerrar las puertas.
No todos los trabajadores fueron evacuados, pues a algunos se les pidió permanecer en su oficina y no salir a los pasillos. Sin embargo, fuentes a lo interno del Palacio confirmaron a Soy502 que se enviaron alertas.
Después de supervisar todo el sitio, se determinó que se trataba de una falsa alarma.