El delantero argentino del Barcelona Lionel Messi, ha recibido hoy su tercera Bota de Oro, que le acredita como máximo goleador de las ligas europeas en la temporada 2012-13.
El jugador de Rosario, Argentina, se ha convertido en el primero en lograr tres Botas de Oro y hoy ha recibido el premio de la mano del exazulgrana Hristo Stoichkov, ganador de este galardón -compartido con el mexicano Hugo Sánchez- en la temporada 1989-90.
A ellos les ha dedicado "éste y los anteriores" balones de Oro -"sin mis compañeros no hubiera conseguido nada", ha subrayado- y también a su familia, "que me quiere y ha estado ahí en los momentos más feos".
Con esta tercera Bota de Oro, el punta azulgrana se queda solo al frente de esta clasificación, al superar al alemán Gerard Müller, los portugueses Eusebio, Fernando Gomes y Cristiano Ronaldo, al rumano Dudu Georgescu, al escocés Ally McCoist y al francés Thierry Henry, todos ellos con dos.
Precisamente, ese medio centenar de goles logrados hace dos temporadas constituyen un récord histórico en las grandes Ligas pues nadie jamás alcanzó tal cifra en un torneo importante de la regularidad.
La tiranía de Leo Messi en el fútbol mundial durante el último lustro queda acreditada con los cuatro Balones de Oro que ha ganado de forma consecutiva (2009, 2010, 2011 y 2012). Y en este 2013 aspira a lograr el quinto, que le confirmaría como el mejor futbolista de la historia del deporte rey.

Es, con 14 tantos y junto a Van Nistelrooy y Altatafini, el máximo goleador en una temporada de Champions (2011-12) y el único que ha marcado 5 goles en un partido de la máxima competición continental (esa misma temporada al Bayer Leverkusen).
Los 91 goles logrados en 2012, entre el Barcelona y la selección argentina, son una cifra de otro planeta, y ahora tiene como próximo objetivo superar al español Raúl González como máximo goleador de la Liga de Campeones. El exmadridista logró 71 tantos en toda su carrera y Messi, a sus 26 años, ya lleva 65.
Solo le falta conquistar la Copa América y el Mundial con la albiceleste, con la que se proclamó campeón del mundo sub-20 (2005) y campeón olímpico en Pekín 2008.





