Un menor de 10 años fue rescatado de las calles, luego de ser explotado laboralmente por su mamá y su padrastro.
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Todos los días era obligado a levantarse temprano. No importaba el sueño o cansancio. No estudiaba, pero sí trabajaba y era obligado por su mamá y su padrastro.
De acuerdo con la investigación del Ministerio Público (MP), el menor, de origen hondureño, era obligado a pedir dinero y vender golosinas en diferentes calles, colonias y semáforos de Villa Nueva.
No tenía infancia. Todos los días tenías que salir de su vivienda, donde también era abusado sexualmente por su padrastro, para ir a vender y si regresaba sin dinero, lo golpeaban.
A veces, las personas optaban por darle víveres en lugar de dinero, pero su mamá se enojaba y lo enviaba a venderlo para que les entregara el dinero que recaudaba y si no lo lograba era golpeado y maltratado por las personas que debían protegerlo.
Denuncia, alerta del maltrato
Una denuncia en el MP alertó de la situación del niño, por lo que el MP inició la investigación y este jueves 26 de mayo realizó un allanamiento en el que aprendieron a tres personas, entre ellos la mamá y padrastro del menor.
Las diligencias se realizaron en un inmueble ubicado en Villa Nueva. En el lugar se detuvo a Noemías García Vásquez, padrastro del menor, a quien se le acusa de trata de personas y agresión sexual con agravación de la pena en forma continuada.
También se detuvo a Nerys Yaleni Carranza Ochoa, madre del niño, por los delitos de trata de personas y agresión sexual con agravación de la pena; y a Milsy Elizabeth García Vásquez, quien era la encargada de vigilar al niño cuando salía a vender a las calles.
Mientras que el menor fue rescatado y ahora se encuentra bajo la protección de las autoridades.
