Durante la época de fin de año es común plantearse las metas del próximo. En ocasiones en nuestros propósitos de año nuevo puede estar cambiar de trabajo.
- MIRA AQUÍ:
¿Te sientes aburrido? ¿Esperas con ansias la hora de salida? ¿No te valoran? Si sientes que la motivación ya no es lo que era, es tiempo de evaluar tu situación. Si cinco o más de estos puntos te identifican, lo mejor es cambiar de trabajo:
Tus habilidades están siendo subutilizadas
Tu empresa no reconoce tus capacidades y te asignan tareas por debajo de tus expectativas. Sientes que "te está quedando chico el puesto".
No estás siguiendo tu pasión
Si no haces lo que amas, nunca descubrirás tu verdadero potencial. Cada día será más rutinario.
Tu jefe es insoportable
Ya hiciste todo lo que estaba a tu alcance por lidiar con ese jefe o compañero que te irrita y maltrata, pero no has tenido éxito.
La compañía se está hundiendo
Tu empresa hizo recortes de personal y reorganizaciones, pero nada parece remontarla de su crisis interna.
Tu pago no es justo
Sentís que trabajas y tienes responsabilidades que no se equiparan a tu sueldo o a tus conocimientos.
Tus valores no coinciden con los de la empresa
Existen diferencias éticas o morales irreconciliables que hacen que tu trabajo sea incómodo.
El trabajo te está enfermando
El estrés, el miedo o la falta de entusiasmo drenan tu energía y afectan tu rendimiento y también tu salud física y mental.
*Con información de Infobae





