Son tiempos muy difíciles para la doctora Ana María Polo. Su programa, Caso Cerrado, no se encuentra en la programación televisiva de la cadena Telemundo por primera vez desde el 2001. Pero eso no es lo que más la preocupa, sino la demanda que le hizo su expareja, Marlene Key, por dos millones de dólares.
"Marlene solicita dos millones de dólares por el uso ilegal del nombre del programa que le pertenece a ella y por la extracción, de parte de Polo, de más de medio millón de una cuenta que compartían", contó una periodista, llamada Erich Concepción que estuvo involucrada en la producción del programa.
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Según su relato, ellas "formaron una relación personal que duró más de 25 años, residían en la misma casa y tenían voluntades recíprocas en relación a las decisiones médicas de la otra". Además, desde octubre de 2014 compartían sus finanzas en una misma cuenta bancaria.
La decisión de Ana María Polo de cederle el nombre del programa que ella conducía y de compartir una cuenta bancaria tiene un motivo: en 2003 le detectaron un cáncer de mama y, ante el miedo de no sobrevivir, decidió garantizarle un bienestar económico a su pareja sin necesidad de casarse (el matrimonio igualitario se aprobó en los Estados Unidos en 2015).
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Meses más tarde, Ana María Polo se sometió a una mastectomía y se recuperó por completo, pero no le pidió a su pareja que le devolviera lo cedido ya que tenían un excelente vínculo laboral y personal. Sin embargo, la situación cambió rotundamente un tiempo después.
