La semana pasada, el mercado ubicado en cercanías del extremo de buses de Jocotales, zona 6 capitalina, permaneció cerrado como medida de prevención ante las intimidaciones de extorsionistas que operan en dicho lugar.
Esta medida afectó tanto a los comerciantes que dejaron de vender sus productos, como a los vecinos del sector que debieron ir a otros mercados.
Sin embargo, ellos no fueron los únicos afectados, ya que ante el temor a ser víctimas de la violencia, dos escuelas cercanas suspendieron las clases para resguardar a los niños.
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De 106 capturas por extorsiones, 75 son mujeres: https://t.co/NilcJmfJOV pic.twitter.com/XYEMVYuEZx
Ante la necesidad de trabajar, el martes los comerciantes reabrieron sus negocios, pero continúan con el temor de algún ataque por parte de los delincuentes.
Presencia policial
Según el portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC), Jorge Aguilar, al menos 125 agentes se encuentran brindando seguridad en Jocotales, como refuerzo para los entre 30 y 35 elementos que habitualmente están asignados a esa zona.
#POLIMERC Actividad preventiva, patrullajes e identificación de personas, mercado de Jocotales, Z.6 y otros sectores pic.twitter.com/uHEMy74zQ8
Aguilar también informó que los agentes permanecerán en el lugar por tiempo indefinido y que la presencia de los elementos ha evitado nuevos ataques contra comerciantes y vecinos.
Hasta el momento, ocho personas han sido capturadas en ese sector por distintos delitos, entre ellos una pareja de hermanos que llevaba consigo una granada que aparentemente accionarían en el mercado.
Entre los ocho detenidos se encontraban hombres y mujeres, mayores y menores de edad. Desde las 5:00 de la mañana, todos los días, los agentes de la PNC ya se encuentran resguardando el mercado, según dieron a conocer a través de su cuenta en la red social Twitter.
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Las extorsiones
Los comerciantes han sido objeto de amenazas desde hace varias semanas y luego de reabrir los comercios fueron colocadas banderas de Guatemala, en señal de que los locatarios ya realizaron el pago que les exigían.
El monto que deben cancelar varía de acuerdo a cada comercio pero oscila entre los 100 y 250 quetzales semanales, según información de las autoridades. El dinero es recolectado por el Comité del Mercado quien posteriormente lo entrega a los delincuentes.
El cierre de los comercios que se suscitó la semana pasada fueron resultado de rumores que aseguraban que pandilleros accionarían una granada en el lugar. Por el momento las autoridades continúan investigando para dar con los responsables.
