En pesadilla se tornó la contratación de una niñera para una familia que sufrió el secuestro de una pequeña de 10 años.
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Como muchos ciudadanos que salen a trabajar diariamente, para brindar un mejor futuro a sus hijos, están los padres de una pequeña de 10 años que buscaron el apoyo de una niñera, para asegurar el cuidado de la menor mientras ellos estaban fuera.
Los señores confiaron en Ilcia Ester Ávila Enríquez, quien se ofreció para ocupar el puesto, sin imaginar que sus intenciones no eran precisamente velar por el bienestar de la pequeña.
Después de solo un mes de trabajar en el lugar, la mujer secuestró a la niña. De acuerdo con la Fiscalía contra Secuestros, que se hizo cargo del caso, tras sacar a la menor de su casa y ocultarla en otro sitio, la niñera exigió a sus padres medio millón de quetzales para liberarla.
Fue la mamá de la pequeña quien denunció el hecho ante el Ministerio Público, en febrero de 2021. Según contó, Ávila respondió a un anuncio en las redes sociales, medio que usó la señora para buscar a una niñera.
Tras ganarse la confianza de la familia, la mujer cometió el crimen, informó el ente investigador, y resaltó que los hechos tuvieron lugar en la cabecera departamental de Jalapa. Han pasado más de dos años desde que Ávila secuestró a la niña, pero se hizo justicia. Un tribunal la condenó a 40 años de cárcel.
#SentenciaCondenatoria
El Ministerio Público, por medio de la Fiscalía contra Secuestros, logró que el Tribunal de Sentencia Penal de Jalapa dictara sentencia condenatoria de 40 años de prisión a Ilcia Ester Ávila Enríquez, por el delito de plagio o secuestro. pic.twitter.com/QEWj1Loqfc
Así la capturaron
La detención de Ilcia Ávila se efectuó dos días después de que sacó a la menor de su hogar y pidió dinero para dejarla ir. La familia recibió asesoría de elementos del Comando Antisecuestros de la Policía Nacional Civil, quienes la ayudaron a negociar con la niñera.
Tras pactar el pago de 2,125 quetzales, a cambio de no hacerle daño a la pequeña, se planeó un operativo que finalizó con la captura de la mujer. Fue en ese momento cuando los padres de la menor supieron que su empleada era la secuestradora.
Las fuerzas de seguridad informaron que Ávila mantuvo en cautiverio a su víctima en un hotel, a donde la llevó bajo engaños, cuando sus papás salieron a trabajar. Durante las diligencias, se secuestró el teléfono desde el cual negoció con los padres de la niña.
Según el MP, ese elemento fue fundamental para comprobar la responsabilidad de la acusada en el delito de plagio o secuestro. Además de la pena de prisión, al momento de quedar en firme la condena, tendrá que devolver el dinero que pagó la familia de la menor y cancelar otros 30 mil quetzales, en concepto de reparación digna.
