El tirador que mató a diez personas en un supermercado de la ciudad de Buffalo fue identificado como Payton S. Gendron, un joven de 18 años, que había sido definido como supremacista blanco.
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Gendron fue arrestado sin derecho a fianza, acusado de homicidio en primer grado, y se presentará ante el juez el martes 17 de mayo. El joven podría enfrentar cadena perpetua.
Según el fiscal, los asesinatos fueron “racialmente motivados” y el hecho se investiga “como un crimen de odio y un caso de extremismo violento por motivos raciales”, según el agente especial del FBI Steven Belanger.
Gendron viajó varias horas para llegar a Buffalo seleccionándolo por estar habitado en su mayoría por población afroamericana, entre sus 13 víctimas -los muertos más tres heridos-, 11 de ellas eran afroamericanos, un día antes inspeccionó la zona.
Payton se declaró no culpable, previo al evento publicó un manifiesto de 180 páginas en donde detallaba el plan para realizar el tiroteo. Los padres de Gendron estaba cooperando con los investigadores, añadió el agente.
El joven investigó en la web ideologías de supremacía blanca, teorías de conspiración basadas en la raza, tiroteos de la mezquita de 2019 en Christchurch (Nueva Zelanda), y al hombre que mató a decenas de personas en un campamento de verano en Noruega en 2011, además transmitió el crimen en vivo por redes sociales.
En las transmisiones en vivo se aprecia en el arma un epíteto racial garabateado y el número 14, probable referencia a un lema de la supremacía blanca. Gendron fue confrontado por la policía en el vestíbulo de la tienda, se puso un rifle en el cuello y fue convencido de que lo dejara caer, al final se entregó a las autoridades.
