La SAT anunció su plan de fiscalización contra diversos sectores, principalmente, las ventas en redes sociales.
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La Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) busca reducir la brecha del sector informal que no genera recaudación tributaria y los negocios que operan en las redes sociales, podrían estar evadiendo el pago de impuestos.
En ese sentido, Marco Livio Reyes, titular de la SAT, explicó este jueves 11 de enero, durante la presentación de los resultados de Fiscalización de 2023 y la Resolución del Conflicto Tributario, que los procesos de fiscalización en el sector de ventas por redes sociales forma parte de una estrategia de fiscalización para mejorar la captación de impuestos para este 2024.
Según el informe de Resultados de Fiscalización 2023 y Resolución del Conflicto Tributario, la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) informó que durante el año 2023 se realizaron 28,197 acciones de fiscalización, y los hallazgos se distribuyen en porcentajes de la siguiente manera:
- Almacenes de ropa - 46%
- Zapaterías - 25%
- Tiendas de consumo -14%
- Servicios profesionales y técnicos - 10%
- Restaurantes - 4%
- Discotecas, Bares y Cantinas - 1%
El comercio digital
El jefe de la institución recaudadora dijo a Soy502 que tienen una sección que se dedica a la atención del comercio digital, pero también vigilan los negocios que se anuncian en redes sociales.
"Vemos si no están inscritos, y si no están inscritos, empezamos a pedirles que se inscriban y si no, mandamos auditores para cerrar los negocios aunque sean tiendas online", enfatizó el funcionario.
Y agregó que existe una actividad fuerte controlando ese proceso económico. "Yo creo que todo debe ser competencia leal, todos los que son negocios abiertos al público deben pagar impuestos que corresponden", explicó.
Sin embargo, estos negocios que operan en las redes sociales y no tributan son parte de la economía informal. Los propietarios de estos negocios que no están registrados han sabido aprovechar los avances tecnológicos para alcanzar más clientes desde la virtualidad.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos (ENEI-2022), realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la informalidad en Guatemala es del 71.1%.
Fiscalización en redes sociales
Óscar Hernández, Intendente de Fiscalización de la SAT, detalló la forma en que operan las ventas en redes sociales y las determinaciones que han considerado a partir del monitoreo que realizan constantemente, y lamentó que aún no existan informes donde nadie esté evitando tributar, cualquiera que sea la forma de negocio con la que cuente.
"La cultura de la no facturación sigue permeando en nuestros sistemas tributarios y obliga a desplegar auditores en todo el país, el resurgimiento de establecimientos temporales que importan productos en época navideña, pero no se inscribe es una constante", dijo el funcionario.
Pero la SAT ha ubicado estos establecimientos digitales a través de la revisión de las plataformas donde se realiza el intercambio comercial, y ha identificado que los vendedores de productos en redes sociales usan la modalidad de pago contra entrega, de modo que la facturación pueda ser obviada, y que, según el intendente de esta área, cuando el comprador solicita el documento tributario, las personas informan del aumento del precio para cobrar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) o desisten de la venta del producto.
¿Persecución o facilitación para formalizar negocios?
Para Pedro Prado, analista de temas económicos de la Asociación de Estudios Sociales (Asies), para evitar la evasión fiscal que supone las ventas en línea no declaradas en la SAT, debiera existir un programa de orientación a los negocios informales a formalizarse facilitando el proceso.
"Un atractivo para la formalización según se ha comprobado es la posibilidad de contar con la Seguridad Social", explicó el analista.
En sintonía con esta observación, Juan Carlos Zapata, de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fudesa), explica que lo más importante en el proceso de formalización y fiscalización de este tipo de negocios, es trabajar de la mano con las instituciones del Organismo Ejecutivo, de modo que quienes hoy están en la informalidad y vendiendo en línea, sean parte de programas de facilitación y acompañamiento, además de la especialización a través de instituciones como el INTECAP.
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Prado concluye que también es importante trabajar en fortalecer la moral tributaria.
"Que tiene que ver con dar a la población evidencia de que los recursos que se pagan en impuestos se puedan ver en mejores servicios de educación, salud por parte del Estado, contar con mejores carreteras es otro ejemplo", comentó.
Zapata añadió que algunas empresas pequeñas que ofrecen productos en las redes sociales, extienden facturas y por lo tanto son ingresos cuantificables, sin embargo, al no existir la formalización de algunos de estos negocios, tampoco existen registros y Guatemala no cuenta con ningún estudio especializado que contenga datos desagregados y respecto de estos movimientos.
