En un acto celebrado en la sede de la Asamblea Legislativa Regional, el portugués se mostró agradecido y emocionado.
"Es un orgullo estar de nuevo en Madeira, donde me crié y tengo mis raíces y mi familia. Es algo que tiene un significado muy especial para mí y es un privilegio inmenso estar aquí con el pueblo madeirense", declaró.

La estatua, esculpida con 800 kilogramos de bronce y de 2 metros y 40 centímetros de altura, se encuentra en el puerto de Funchal, capital de Madeira, cerca del Museo dedicado al jugador y que se ha convertido en un atractivo turístico más de la región.
Durante el acto, organizado por un periódico local y al que acudieron centenares de madeirenses, la madre del futbolista se mostró visiblemente emocionada y el mismo Ronaldo reconoció que este tipo de homenajes le provocan mucha alegría.





