Un tribunal benefició al hijo de un pastor evangélico y actual diputado del Congreso por el partido de la UNE.
EN CONTEXTO: Estuvo prófugo por un caso de corrupción y ahora es candidato a diputado por la UNE
Sergio Enríquez Garzaro, hijo del pastor Sergio Enríquez, líder de la iglesia evangélica Ministerios Ebenezer y actual diputado de la Unidad Nacional de la Esperanza, fue beneficiado por el Tribunal de Mayor Riesgo de Quetzaltenango.
El Tribunal absolvió a Enríquez Garzaro y cinco personas más en el caso Chicamán, quienes eran acusados de lavado de dinero.
"En la resolución, el Tribunal manifestó que los sindicados no tenían conocimiento de la procedencia ilícita del dinero y que el delito de lavado de dinero u otros activos lo cometieron los otros sindicados aún cuando la Fiscalía presentó las pruebas correspondientes", informó el Ministerio Público.
Ante la resolución del Tribunal, el MP apelará el fallo.
El caso
Según la investigación de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Sergio Enríquez (hijo) habría incurrido en lavado de dinero al colaborar con la exdiputada Emilenne Mazariegos para adquirir un vehículo con los fondos obtenidos de la municipalidad de Chicamán.
La gestión se concretó por medio de Mis Mantas, S.A., la empresa que Enríquez administra junto a Víctor Hugo Enríquez Morales, quien ya guarda prisión preventiva por este caso.
Emilenne Mazariegos depositó un total de 300 mil quetzales a la cuenta bancaria de Mis Mantas, mientras que Sergio Enríquez aportó 80 mil quetzales.
Posteriormente, Mis Mantas giró cheques por 250 mil quetzales y compró un cheque de caja por casi 134 mil quetzales (Q133,864). Que fue usado para comprar un vehículo modelo 2012 que, aunque aparecía a nombre de la compañía, era utilizado por la exlegisladora del Partido Patriota.
Emilenne Mazariegos, su madre Ana Patricia Mazariegos y su esposo Fernando Siliézar, junto a otras 13 personas, están señalados de integrar una estructura criminal que, por medio de la adjudicación de cinco proyectos que permanecen inconclusos, desviaron fondos de la Municipalidad de Chicamán, Quiché, para beneficiarse.