El drama de los familiares de las víctimas de la fiesta en Perú

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Una fiesta clandestina en Perú terminó en tragedia luego de que 13 personas, en su mayoría jóvenes, perdieran la vida en su intento por huir de las autoridades que allanaron el lugar. 

La fiesta fue convocada por redes sociales y violaba las normas del gobierno, que prohibió reuniones grupales debido a la pandemia del coronavirus. 

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Fiesta clandestina en Perú deja 13 muertos por asfixia

Según reportes de testigos, el pánico se desató entre los jóvenes que escucharon cuándo las autoridades pidieron a las mujeres abandonar el recinto. 

Esto motivó una estampida humana que terminó con la vida de 13 personas. Además, las autoridades confirmaron que hicieron 23 capturas. 

Drama familiar 

Familiares en las afueras de la discoteca condenaron el hecho y responsabilizaron a la Policía local de actuar de forma malintencionada, lo cual provocó la muerte de los jóvenes. 

La fiesta tuvo lugar en la discoteca "Thomas Restobar", una vivienda de dos pisos que tenía licencia desde 2016, según el municipio de Los Olivos, un populoso distrito al norte de Lima.

Franco Ascencios Carrasco narró cómo su pareja, Angie Inés Flores, murió en sus brazos luego de acudir a la fiesta el sábado por la noche. 

"Si yo sigo vivo, Dios sabe porqué, mi compañera que estaba conmigo, murió en mis brazos", expresó Carrasco.

Cuando "la policía intervino, dijeron bajen las mujeres (...) Yo llevé cargada a mi enamorada, pero falleció camino al hospital", dijo a la radio RPP.