En 1990 el mundial se llevó a cabo en Italia y es considerado como uno de los menos llamativos en cuanto a espectáculo, pues se caracterizó por un tipo de juego defensivo y partidos definidos por los penales y las tarjetas rojas.
Alemania fue la campeona, convirtiéndose el alemán Franz Beckenbauer en la segunda persona después de Mario Zagallo en ser campeón como jugador y como técnico. La subcampeona fue Argentina y en tercer puesto quedó Inglaterra.

Colombia regresó a una Copa del Mundo, tras 28 años de ausencia. Pese a ello no logró quedar entre los primeros puestos y el Balón de Oro quedó en manos de Salvatore Schillaci.
En cuanto al afiche, fue diseñado por el pintor y escultor abstracto Alberto Burri, uno de los más reconocidos en Italia durante la segunda mitad del siglo XX y gran aficionado al fútbol. En la imagen se ve el Coliseo romano como elemento principal y con las banderas de las naciones mundialistas como césped.
Ciao fue la mascota de esta competencia y se la conoció como "la mascota incomprendida" por su carácter abstracto. Representaba la figura de un futbolista con formas geométricas y los colores de la bandera italiana. Lleva además un balón por cabeza.

El esférico oficial fue el Etrusco Unico. Para ello sus creadores se inspiraron en la pelota tipo Tango, pero añadieron los dibujos de tres leones etruscos y 20 triángulos impresos en la pelota.








