La Historia del Parque Central de Coatepeque, conocido como la Ciudad de las Gardenias, se remonta a 1928. El embellecimiento de este icónico espacio inició por un esfuerzo comunitario liderado por Obdulio Mere y Catalina Serrano
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Según registros de la Municipalidad de Coatepeque, el embellecimiento del Parque Central de la Ciudad de las Gardenias tiene sus raíces en 1928, cuando el caballero español Obdulio Mere, entonces alcalde primero, impulsó junto a un comité de señoritas la transformación de este espacio público.
La organización fue encabezada por la señorita Catalina Serrano, quien junto a un grupo de jóvenes entusiastas se encargó de reunir fondos mediante rifas, kermeses, funciones de cine y bailes.

Gracias a esa iniciativa ciudadana, se logró pavimentar con ladrillo de cemento los costados Oriente y Norte del parque.
Años más tarde, bajo la gestión de don Luis Figueroa M., también como alcalde primero, se concluyó la pavimentación total con recursos municipales, alcanzando un costo de Q3 mil 292.16, incluyendo la colocación de bancas de concreto.

La municipalidad también promovió la siembra de flores en los arriates, actividad encomendada a varias señoritas de la sociedad, aunque con el paso del tiempo la mayoría de esas especies ornamentales desaparecieron.
Durante la administración del intendente municipal, Arturo Valdez Oliva, se ordenó la construcción del quiosco, así como de una fuente luminosa que se convirtió en punto de encuentro y deleite de los vecinos.

Más adelante, cuando Fernando Amado N. era alcalde primero y Teófilo López Barrios, comisionado político, el quiosco se consolidó como uno de los principales atractivos del parque. En este espacio se realizaban conciertos de marimba dos veces por semana, tradición que reunía a cientos de vecinos sin distinción de clase social.
En las noches de luna, al compás de la marimba, el parque se llenaba de parroquianos que caminaban alrededor del mismo, ya fuera en pareja, en familia o con amigos. Era costumbre de novios y casados dar vueltas tomados del brazo mientras disfrutaban de la música y el ambiente festivo.

Así, el Parque Central no solo fue el resultado de esfuerzos comunitarios y gestiones municipales, sino también el escenario de una tradición cultural que marcó la vida social de coatepecanos por varias generaciones.
El municipio de Coatepeque es considerado un centro urbano estratégico dentro del departamento de Quetzaltenango, destacando por su importante crecimiento económico y su actividad comercial.
La vida social y cultural de Coatepeque ha estado históricamente ligada a su Parque Central, siendo un punto de encuentro que refleja su identidad, un rol que ha sido documentado en publicaciones locales.




