La ciencia brinda respuestas a las dudas que la humanidad tuvo por años o cura enfermedades. Pero también, a veces, permite obras de arte o de ingeniería.
Es el caso del nuevo BMW i8. Es un auto híbrido, es decir que puede funcionar con electricidad y combustible, con toda la capacidad y las prestaciones de los autos de la marca alemana que caminan por gasolina. Pero tiene una característica especial, está hecho 893 mil 350 kilómetros de fibra de carbono.
Esa longitud es más del doble de la distancia entre la Tierra y la Luna. Esta tecnología se utiliza también en el modelo BMW i3.
La longitud es tan grande porque la fibra es muy delgada. Cada “hilito“ es mucho más fino que un pelo humano. Para formar la carrocería se necesita tejer estos hilos hasta formar una tela que se moldeará para darle forma al vehículo. El resultado es que pesa el 30% de algo similar en acero y es, inclusive, más fuerte.
El vehículo, por ahora, solo está disponible en Europa. Por un precio cercano a los 130 mil dólares. Es decir, aproximadamente 1.2 millones de quetzales.
COn información de www.microsiervos.com