El reconocido guía evangélico, Carlos Rivas, pidió perdón a los más de 400 feligreses que asistieron a su primer culto dominical, tras ser dejado en libertad y bajo medidas sustitutivas por el Juzgado de Paz de La Libertad, El Salvador, luego de agredir a su amante en un motel, acción por la que fue detenido y estuvo varios días en presión.
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El caso que conmocionó a la sociedad salvadoreña, sigue dando de que hablar, ya que con lágrimas y con un notorio agobio, el pastor del Tabernáculo de Avivamiento Internacional (TAI), Carlos Rivas, expresó que su esposa, Verónica Lissett Escobar, es un robusto árbol de Roble, debido a la manera cómo ella ha afrontado la dificultad en la que se han visto envueltos tras comprobar la infidelidad de su esposo.
Escobar calificó los hechos como “una prueba”, para ella, sus hijos y su marido.
Pastor Carlos Rivas compara a su esposa con un roble por su fuerza y su perdón http://t.co/MncSsAfcno pic.twitter.com/k79TatOQEg
Personal de seguridad del pastor indicó que tenían órdenes directas de no permitir el acceso a los medios de comunicación, por lo que la prensa hizo guardia en las afueras del lugar, pero no pudo acceder al pastor.
El guía del TAI fue detenido el viernes 20 de marzo por la Policía Nacional Civil (PNC) por aparentemente agredir a Diana Castillo, una mujer con quien sostenía una relación de infidelidad desde hace dos años.
Con informacion de ElBlog y La Prensa Gráfica





